Sin la intensidad que afecta a Génova, al Partido Popular de Madrid también le asuela un terremoto, con broncas entre el presidente de la Comunidad, Ignacio González, y la presidenta del partido, la arriscada Esperanza Aguirre, a la que algunas quinielas sitúan como aspirante a la alcaldía (queda mucho tiempo para pronosticar nada y la lideresa es impredecible, apuntan varios cuadros populares). No atraviesa mejor momento la regidora madrileña, Ana Botella, cuya mala imagen, ajada por el Madrid Arena y por sus frecuentes traspiés verbales, ha hundido al PP en su feudo de Cibeles, según las encuestas. Botella se juega el todo por el todo el 7 de septiembre en Buenos Aires, el día en que se sabrá si Madrid es o no olímpica en 2020.
Pero incluso el equipo de Gobierno es consciente de que, aun consiguiendo los Juegos, la victoria del PP con Botella al frente en el Ayuntamiento de Madrid parece muy difícil, casi descartada. Una hipótesis que coincide sospechosamente con la encuesta telefónica que circuló por la capital hace dos semanas, a la vez que la presentación del dossier de Madrid 2020 en Lausana, según ha podido saber este medio a partir de varias personas a las que se contactó. Una encuesta de autor desconocido pero que, por su intención, parece hecha por el PP, ya que las preguntas sugieren que la alcaldesa intenta sondear su futuro político utilizando como pretexto las Olimpiadas.
Esta es la reproducción, más o menos fidedigna, del contenido de las llamadas: alguien que se identifica muy rápido dispara cuatro cuestiones, todas con la candidatura olímpica de por medio pero con un trasfondo político. Las primeras preguntas son simples –“¿Apoya usted a Madrid 2020?” y “¿Cree que los Juegos ayudarían a mejorar la economía?”-, pero las dos o tres últimas tienen su miga.
“Si resultara que Madrid fuera designada sede de los Juegos Olímpicos de 2020, ¿cómo vería la continuidad de Ana Botella al frente del Ayuntamiento?”. Pero ahí no acaba la cosa. Si el interpelado responde algo así como “mal” (algo nada improbable, teniendo en cuenta que el sondeo de El País el grupo popular pasa del 50% al 30%, y bajando), la siguiente pregunta es: “entonces, ¿a quién votará?”.
La sospecha es tan grande, que varias de las personas inquiridas contactaron por separado con este medio para contar su versión. Todas coincidían en la intencionalidad política de la interrogación. La que seguro no ha encargado la encuesta es la candidatura de Madrid 2020, ya que la única que costeó fue la que presentó paralelamente al COI a finales de enero de este año. Fuentes del equipo que puja por la victoria madrileña el próximo 7 de septiembre se mostraron sorprendidas al conocer la encuesta secreta que surca Madrid.
