La sesión de control de este jueves, a la que se somete cada quince días el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno en el Parlamento, ha servido al gobernante para atribuir a su partido, el PP-A, "la parte más central, ocupando la centralidad del espacio político y social" en esta comunidad autónoma. Lo ha hecho frente a las críticas de Vox, partido que insiste en tildarle de "socialista", como "continuista de las políticas del PSOE". De forma paralela, el barón regional ha acusado a la formación que lidera Juan Espadas de querer "asimilar" a los populares con la derecha populista más extrema.

"Ni nosotros somos ellos, ni nosotros somos ustedes", le ha respondido Moreno Bonilla al portavoz parlamentario de Vox, Manuel Gavira. Asegura el presidente andaluz que el Partido Popular de Andalucía no está "ni al lado de una izquierda caduca, ni al lado de una derecha que no es capaz de sintonizar con los sistemas productivos, ni con las clases trabajadoras". Para el gobernante centrista los discursos de la formación de Santiago Abascal "a veces son excesivamente antiguos y poco rigurosos".

Los mensajes dedicados por Moreno a quienes fueron sus socios de legislatura, durante el primero de sus dos gobiernos, el que conformó junto a Ciudadanos, se han producido casi a la vez que la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, soltaba por completo cualquier lastre que pudiera tener con Vox, concretado en un mensaje dirige en la Asamblea a su líder autonómica, Rocío Monasterio. Un gesto que marca el camino hacia el intento del PP de conseguir la mayoría absoluta para Ayuso (hay encuestas que la sitúan a un escaño de lograrlo).

En clave andaluza y mirando hacia la reciente moción de censura, protagonizada por Ramón Tamames, Moreno le ha dejado claro a Vox, a modo de reproche que "nosotros no vamos a hacerle ningún regalo a Sánchez en prime time como han hecho ustedes".

Ha sido una clara referencia del presidente de la Junta al "balón de oxígeno" que para Génova ha supuesto esta pintoresca iniciativa de Vox, que ha devenido en lo que algunos han llamado ya el 'ticket' electoral del presidente del Gobierno con la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y su plataforma Sumar.

Fuentes de la dirección regional del PP, consultadas por Vozpópuli, aseguran que Moreno Bonilla insistirá en marcar perfil de "centralidad", en precampaña y campaña, hasta las elecciones municipales del 28 de mayo, más allá de que Vox le acusara este jueves, por enésima vez, de ser "socialista".

Sostienen desde la sede regional de los populares, en la sevillana calle San Fernando, en que el llamado "efecto Juanma" les va a funcionar en las urnas para el trasvase de voto socialista, en zonas templadas de este electorado, descontento con las políticas de Sánchez en coalición con Unidas Podemos.

Más allá del llamado "voto de castigo", en el marco del plebiscito contra Sánchez en que Génova pretende convertir las autonómicas y municipales en toda España, desde el PP-A establecen, de forma añadida, un claro paralelismo con lo que ocurrió en las autonómicas del 19-J. Fue entonces cuando muchos votantes del puño y la rosa (un 20% de quienes votaron a Susana Díaz en 2018) vieron a Moreno como un dique de contención para que Macarena Olona, candidata de Vox, no entrara en el palacio de San Telmo como vicepresidenta.

Una vez absorbida la totalidad del espacio electoral andaluz de Ciudadanos los de Moreno Bonilla intentarán recuperar también en municipales al votante más moderado de Vox que antes escogía la papeleta del PP y ahora pueda estar desencantado con los de Abascal en Andalucía. Sin embargo, en la sede regional popular son conscientes de que el partido opositor en el Parlamento andaluz tiene un nicho de votantes "muy fidelizados".

Moreno ha reprochado también a Manuel Gavira que su formación no apoyara este miércoles en el Parlamento la Ley de Economía Circular  una norma de la anterior legislatura, que busca la "triple sostenibilidad ambiental, económica y social", y supone una "revolución circular" al convertir los residuos en recursos, según el Gobierno andaluz.

La normativa contó con los votos a favor de PP y PSOE, el voto contrario de Vox y la abstención de Por Andalucía y el Grupo Mixto-Adelante Andalucía. En total, el PP aceptó incorporar 61 de 102 enmiendas que había presentado el PSOE-A.

Los conciertos con la sanidad privada, otro punto fuerte de la sesión de control

La oposición de izquierdas, especialmente Por Andalucía y PSOE, han aprovechado la sesión de control para preguntarle al presidente de la Junta por los conciertos con la sanidad privada. Inmculada Nieto, portavoz de la confluencia de izquierdas, ha acusado al Gobierno andaluz de "privatizar la atención primaria en el BOJA (Boletín Oficial de la Junta de Andalucía)". Tras la corrección que hizo la Consejería de Salud (una vez publicadas una serie de tarifas) y haber aclarado los casos de extrema necesidad en que se aplicarían, los sindicatos UGT y Comisiones Obreras siguen sin estar conformes.

Ambas centrales sindicales firmaron el llamado Pacto Social con Moreno y la patronal, hace unos días. En dicho acuerdo se destinan más de 3.300 millones a reforzar la atención primaria de forma anual. No obstante, las manifestaciones continúan y están previstas movilizaciones para este próximo sábado en las ocho provincias. Las mesas sectoriales de negociación entre las partes siguen abiertas para cerrar un acuerdo.

El Pleno del Parlamento andaluz ha rechazado este jueves, con los votos del PP-A y Vox, instar al Gobierno de la Junta a retirar la Orden de 23 de febrero de 2023, por la que se actualiza y desarrolla el sistema de presupuestación y tarifación de convenios y conciertos que suscriba el Servicio Andaluz de Salud para la prestación de asistencia sanitaria en centros sanitarios.

Desde el PSOE su portavoz, Juan Espadas, ha querido bautizar este asunto com el "caso Emergencias", para denunciar las presuntas irregularidades en contrataciones "a dedo" por parte de la Junta de Andalucía. Moreno le ha pedido "rigor", así como que "no difunda bulos que pueden explotarle en las manos como si fueran bombas".

El presidente de la Junta ha vuelto a asegurar que todas las contrataciones de emergencia con la privada "se hicieron conforme a la legalidad", e informes jurídicos correspondientes. La línea argumental de Moreno para responder tanto a las críticas de Nieto como a las de Juan Espadas, portavoz parlamentario socialista, también se ha basado en afirmar que en los últimos cinco años de gobiernos del PSOE-A, el presupuesto de sanidad de la Junta "aumentó un 17%, y el de conciertos un 72%", mientras que con el Ejecutivo del PP-A el presupuesto de sanidad "aumentó un 41%, y los conciertos un 27%", por lo que –ha incidido el presidente– los socialistas "concertaban mucho más" y "todos los gobiernos socialistas conciertan", en alusión al resto de comunidades.

El gobernante del PP, tras reprocharle a Inmaculada Nieto que no criticara los conciertos del PSOE con la privada, al recordarle también que IU gobernó con los socialistas en Andalucía, ha llegado a asegurar que la comunidad autónoma que preside es "la que menos concierta con la sanidad privada". En este punto, Juanma Moreno ha hablado de gobiernos de alianzas autonómicas entre PSOE y Podemos en los que no se pone el foco de esta materia sanitaria.