La Policía Nacional se puso en contacto la semana pasada con Coto Matamoros para comunicarle que es uno de los famosos que ha sido víctima de pinchazos telefónicos dentro del caso "Deluxe". El exrepresentante y colaborador televisivo ya ha solicitado su personación en la causa tras haber sufrido esta "violación de su intimidad", según él mismo confirma a Vozpópuli.
El denominado "caso Deluxe" será uno de los juicios más mediáticos de la historia reciente de la comunicación. El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid, Marcelino Sexmero, tiene cerca la conclusión de la investigación. Las diligencias están llegando ya a su fin, según informan fuentes jurídicas a este medio.
Este caso tiene dos focos principales: el policial y el periodístico. Un policía jubilado Ángel Jesús Fernández Hita era quien presuntamente pasaba información personal al redactor del programa Gustavo González. Unos datos totalmente confidenciales con los que buscaban dar horas y horas de televisión.
Dentro de esta trama el magistrado ya tiene a más de una veintena de investigados, entre ellos miembros de la productora, periodistas o directores del propio programa. La lista de famosos afectados por estas filtraciones es más amplia. Las investigaciones cifran en 120 personas los que sufrieron este robo de datos. Personalidades como Isabel Pantoja, Omar Montes o Francisco Rivera. De todos ellos solo unos pocos se han personado en la causa.
"Tengo todo el derecho a personarme"
Uno de los últimos rostros conocidos en conocer esta circunstancia ha sido Coto Matamoros. El excolaborador televisivo recibió la semana pasada la llamada de la Policía Nacional. "Al principio pasé, pero luego pensé estos tíos son unos delincuentes y tengo todo el derecho del mundo a personarme", ha afirmado a Vozpópuli. Incluso ya ha presentado el escrito al juzgado de la mano de su abogado Santiago Marín.
Los investigadores confirmaron al exrepresentante que había sufrido escuchas telefónicas pero que no podían desvelar por parte de quién por la normativa de protección de datos. Matamoros considera que la productora de 'La Fábrica de la Tele', que elabora Sálvame, ha "sobrepasado todos los límite". "He estado metido en esa basura pero jamás he realizado ese tipo de métodos violando mis intimidades", ha rechazado.
Espías, escuchas y pinchazos
El hermano del colaborador Kiko Matamoros reconoce que no le gustan "nada los juzgados" porque muchas veces es perder el tiempo pero este caso le da "tanto asco" que ya se lo ha propuesto como algo "personal". Han estado espiando, escuchando y pinchando los teléfonos.
Uno de los focos al que dirige su arsenal Coto es a Paolo Vasile, empresario italiano CEO de Mediaset, porque cree que "no le va a joder la vida y no va a violar las leyes". "Es el colmo como manejan la justicia y como controlan una mafia que se quieren reír de ti en tu cara", crítica.
Para Matamoros es "inadmisible" este tipo de situaciones que no se pueden dar en "cualquier lugar del planeta". "Encima un programa que se usa como altavoz del Ministerio de Igualdad", remarca. El exrepresentante lanza un debate: ""cómo se puede renovar la licencia de Mediaset, una cadena que se dedica a delinquir".
Famosos no se personan por dinero
El conocido rostro de televisión destaca que muchos de los famosos que han sido víctimas de la trama del 'caso Deluxe' no han denunciado porque les tienen "miedo". Algunos son clientes y presuntamente han arreglado el tema por una cantidad económica o con la programación de un espacio. "Voy a entrar a muerte sin muletas", reafirma.
La Policía Nacional no le aclaró sobre qué asuntos le han practicado escuchas. Él tiene sus sospechas por los intereses que tenía la productora en algunos de sus temas personales. Para finalizar, Matamoros lanza un mensaje reflexivo para el futuro: sospecha que los directores del programa conocían de donde salía la información que publicaban. "Podría llegar a tener hasta una responsabilidad subsidiaria para Vasile", concluye.