El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha visto obligado a interrumpir durante unos minutos el discurso de clausura de la Convención Política que el PSOE celebra en A Coruña por la indisposición repentina de un asistente al acto, que ha requerido atención sanitaria inmediata.
El propio Sánchez se ha percatado de que algo extraño sucedía en la parte superior del auditorio del Palexco, el recinto donde se celebra desde el viernes la reunión de los socialistas, tras escuchar algunos gritos, y ha preguntado en voz alta si había un médico en la sala, donde se reúnen 1.700 asistentes, interrumpiendo su alocución.
La propia vicepresidenta primera, María Jesús Montero, que había precedido a Sánchez en el uso de la palabra, y que es médica, ha subido rápidamente a prestar ayuda al militante socialista, junto al eurodiputado Nicolás González Casares, que es enfermero.
Se han movilizado los equipos de seguridad, así como los sanitarios desplazados a la convención, en medio de un gran silencio y una enorme expectación, puesto que no se conocía el alcance de lo sucedido, pero casi diez minutos después se ha reanudado la clausura y el propio Sánchez ha deseado una "pronta recuperación" al afectado. Los servicios de emergencias médicas destinados en la Convención han evacuado al hospital a la persona que se ha sentido indispuesta durante el acto, debido a que estaba sufriendo un ataque de ELA.