La puesta en marcha de un hospital de campaña en Sabadell está sufriendo contratiempos que amenazan su despliegue inmediato. El Govern de Cataluña, con Quim Torra al frente, no encuentra adecuado el pabellón que el Ejército de Tierra está levantando en el polideportivo del municipio: consideran que su distribución no es adecuada. Desde el Ayuntamiento claman contra el retraso y piden un espacio para tratar a los enfermos por coronavirus.
Dentro de la Operación Balmis contra la pandemia, el Ministerio de Defensa anunció el despliegue de una serie de hospitales de campaña en diferentes localidades españolas. El Ejército de Tierra levanta los recintos de campaña para que el personal sanitario pueda derivar a los enfermos por coronavirus y haya camas suficientes para todos los pacientes.
Ya se han ampliado instalaciones en el Gregorio Marañón de Madrid o en el Hospital de Segovia, entre otros. También han colaborado en el acondicionamiento del pabellón de IFEMA. Hasta el momento, según fuentes consultadas por Vozpópuli, no se ha registrado ningún problema en ninguno de estos trabajos.
El Ayuntamiento pide explicaciones
Hasta llegar a la localidad catalana de Sabadell. Con una población superior a los 200.000 habitantes, el Ayuntamiento había acondicionado el polideportivo municipal para que el Ejército levantase un hospital de campaña con capacidad para 240 pacientes. Este lunes, los militares del Mando de Ingenieros de Salamanca comenzaron a montar los pabellones, con contenedores de aseo e instalación de electricidad y agua.
El diseño del hospital de campaña no ha convencido al Departament de Salut, dirigido por la consellera Alba Vergés. En vez de tiendas militares para albergar a los pacientes prefieren separar con paneles a los enfermos por coronavirus. Las trabas del Govern amenazan los plazos para abrir estas instalaciones sanitarias de contingencia.
La alcaldesa de Sabadell, la socialista Marta Farrés, ha instado al Govern a que desbloquee la situación y que permita la apertura del hospital de campaña con la mayor premura posible. La portavoz de Salud del PSC, Assumpta Escarp, culpa al Govern de dar el visto bueno a las instalaciones y ponerles trabas en el último momento: "Esta mañana, sin que se hubiera producido ningún cambio en los criterios de logística y asistenciales, la Conselleria ha dado orden de parar la instalación. Debe dar explicaciones, porque además los ingenieros han expresado su disposición a llevarlo adelante".