En el marco de la operación SLICE, agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid han detenido a seis personas y han investigado a otras dos, pertenecientes a siete empresas alimentarias situadas en las provincias de Madrid, Córdoba, Toledo y Badajoz, que se dedicaban a manipular y falsificar la trazabilidad y el etiquetado de envases de productos cárnicos como jamón y lomo.
Se les imputan los delitos contra la salud pública, estafa, falsificación, contra la propiedad industrial y hurto relativo al mercado y a los consumidores, ha informado este jueves la Comandancia de Madrid en una nota de prensa.
La investigación se inició el pasado año cuando se detectó una documentación sospechosa relativa a unos lotes de envases de loncheados de lomo, paleta y jamón que habían sido preparados para la comercialización como productos de cebo ibérico e ibérico en una nave de Córdoba, y desde donde se enviaban a una importante cadena de supermercados para su venta a nivel nacional, la cual desconocía la falsedad de los productos.
El análisis de la documentación del Área de Calidad Alimentaria de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid y del Servicio de Control de Calidad Agroalimentaria de la Junta de Andalucía, así como informaciones aportadas por certificadoras, constataron dichas irregularidades relacionadas con una posible falsificación documental y /o duplicidad en lotes a nivel nacional.
967.000 euros de valor
Posteriormente en un centro logístico de Getafe de la cadena de supermercados los agentes inmovilizaron 5.768 envases de productos supuestamente ibéricos dispuestos para ser vendidos.
Además, descubrieron que en otros centros logísticos de la misma cadena, situados en las provincias de Córdoba, Toledo, Barcelona, Sevilla, Málaga, Alicante, Almería, Cádiz, Zaragoza y Valladolid, tenían almacenados miles de envases con productos ibéricos que también presentaban las mismas irregularidades relacionadas con la utilización de registros sanitarios mercantiles de terceras empresas sin su consentimiento, así como falsificación y manipulación en su trazabilidad y etiquetado.
En estos centros, con el fin de que estos falsos productos ibéricos no fueran introducidos en el mercado alimentario, se inmovilizaron un total de 56.100 envases más de productos loncheados.
Se han incautado un total de 63.123 envases de productos loncheados, que en el mercado hubieran alcanzado un valor de 967.000 euros y hubieran ocasionado un riesgo para la salud pública, al ser considerados no aptos para el consumo.