El atropello el pasado 4 de noviembre a las puertas del colegio Montealto, en Mirasierra, está en manos de la Fiscalía, que ejercerá la acusación si así lo considera contra la conductora que causó la muerte de María, una alumna de apenas 5 años, y las heridas graves a las otras dos víctimas, de 10 y 12 años. Según recoge ABC, los padres de la niña fallecida no han emprendido acciones legales contra la mujer que conducía el vehículo, que es madre de dos estudiantes del mismo centro.
Esta noticia no ha sorprendido en la Policía Municipal debido a la actitud mantenida por los progenitores, de total conciliación pese a su enorme dolor. La madre de María, que trabaja como administrativa en el centro, se abrazó en el mismo lugar de los hechos contra la ahora investigada.
Por otro lado, la Unidad de Atestados de Tráfico de la Policía Municipal, que investiga el caso, ya ha remitido al Ministerio Público el informe de los hechos y considera que todo fue a causa de una maniobra involuntaria, por falta de pericia o despiste, de la conductora.
Ahora, la Fiscalía tendrá que pronunciarse al respecto y decidir si hay causa penal contra la investigada, más allá de que luego pueda abrirse un procedimiento civil. Si se trata de un homicidio imprudente, penado con un máximo de cuatro años de prisión, o no ve responsabilidad penal en el asunto.
