La Atención Primaria tiende a ocupar un espacio prominente en los discursos políticos que atañen a la sanidad. Siempre recibe halagos, y es objeto de sesudas Estrategias a largo plazo que terminan siendo papel mojado. El claro ejemplo lo hemos visto hace poco: de los 1.088 millones presupuestados para Primaria el año pasado, con cargo a los fondos europeos, se han gastado 0 euros. Estos días, los graduados en Medicina que han superado la prueba MIR eligen su plaza para ejercer como residente los próximos cuatro años y los datos apuntan a que el abandono de la Atención Primaria va camino de enquistarse.
Según las estadísticas recogidas por el Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, de los 2.000 primeros electores de plazas MIR, solo 42 han escogido como destino la Medicina de Familia. Es decir, que solo el 2,1% de los futuros médicos ha escogido el centro de Salud frente al hospital. Una muestra más de la falta de planificación sanitaria que hay en nuestro país, dado que la Atención Primaria se torna imprescindible ante una población cada vez más envejecida y con enfermedades crónicas que requieren de un seguimiento continuado.
Entre los primeros 400 MIR en escoger plaza, la futura élite sanitaria -son los que mejores calificaciones han obtenido y por eso eligen primero-, solo 6 se decantan por la Medicina de Familia. En cambio, la especialidad más escogida es Dermatología, elegida por 75 de los 400 primeros. Esta especialidad suele ser de las favoritas cada año por su excelente remuneración y la posibilidad de abrir consulta propia y compaginarla con la pública. En segundo lugar aparece otra de las habituales en el ranking: Cardiología.
En estos momentos, todavía quedan libres el 98% de las plazas convocadas para Medicina de Familia, mientras que para Dermatología y Cirugía Plástica se han agotado el 100%. La situación demuestra que el problema sigue enquistado, pues en la convocatoria anterior solo se habían seleccionado 39 plazas de Atención Primaria entre las 2.000 primeras.
Abandono de la Atención Primaria
¿Cuál es la razón por la que la Medicina de Familia ha dejado de interesar a las nuevas de generaciones? Los profesionales de los centros de Salud no ven detrás ninguna razón filosófica o de cambio de mentalidad, sino algo tan tangible como la depauperización de este ámbito sanitario y la falta de recursos para llevar a cabo su actividad de manera adecuada.
Así lo ve Vicente Matas, médico de Familia al frente del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada: "El quid de la cuestión es que Atención Primaria ha sufrido mucho con los recortes que se llevaron a cabo desde el año 2010. Apenas se acaba de recuperar lo que se invertía en 2009. Las plantillas son escasas y las cargas de trabajo son muy grandes. Este conjunto de factores hace que muy poca gente elija la especialidad de Medicina de Familia, y algunos de los que lo hacen renuncian a ella tras ver el panorama. El año pasado hubo 60 personas que eligieron Atención Primaria y no llegaron a tomar posesión de la plaza MIR".
Esta situación está provocando que no haya médicos de Familia para ocupar plazas de interinidad en lugares de difícil cobertura. Un elemento que también contribuye a la España vaciada. "Tampoco hay personal para sustituir a médicos enfermos o de vacaciones. Las consultas diarias de 50 o 60 personas son muy frecuentes. Esto es algo que los pacientes están sufriendo ya, las demoras en Atención Primaria. En ocasiones, se prolongan hasta una semana. Es la pescadilla que se muerde la cola", denuncia Matas.
Es habitual que los médicos de Atención Primaria encadenen contratos por meses o, incluso, por semanas. "¿Cómo vamos a fidelizar a los que acaban la carrera de Medicina si no podemos ofrecer estabilidad?", se pregunta este médico. Sobre la falta de financiación pública en los centros de Salud no escatima en críticas hacia la clase política: "Son muy torpes, incompetentes e inútiles. Un 80 por ciento de los problemas sanitarios se pueden solucionar en Atención Primaria. Si no se les puede atender, los pacientes se van a las Urgencias del hospital, que son mucho más caras. Se gastan recursos hospitalarios en problemas que se podían solucionar en Atención Primaria con 10 minutos, un médico y un fonendo".
Se gastan recursos hospitalarios en problemas que se podían solucionar en Atención Primaria con 10 minutos, un médico y un fonendoVicente Matas, médico de Familia al frente del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada
El aumento en las listas de espera para las consultas de Atención Primaria está provocando que muchos pacientes acudan a la sanidad privada para acceder a los servicios propios de un ambulatorio. Esta situación ha sido denunciada por el propio sector privado a través del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS).
"No he convencido a mi hija para que estudie mi especialidad"
El caso paradigmático de cómo está la Atención Primaria es, probablemente, el de Lorenzo Armenteros, médico de Familia y miembro de la Sociedad Española de Médicos Generales. Armenteros cuenta a Vozpópuli que ha tratado de convencer a su hija, también médico, de que haga su especialidad, pero no ha sido posible. "No he podido. Ha escogido Medicina Interna porque le gusta la medicina general, pero ve que es más gratificante. Estuvo conmigo un verano y vio lo que se sufre".
Armenteros, sin embargo, saca a relucir todas las bondades de su vocación, la del médico de Familia, un agente clave para el modelo sanitario español: "Hay trabajo por un tubo. Quien coja esta especialidad va a tener salida laboral. Es la especialidad que ve al paciente al completo. Conoces a su familia, te acercas a sus emociones, sueles tener un conocimiento integral de la persona y un trato personal que contribuye a la práctica clínica. Es muy raro que alguien diga “mi cardiólogo, o mi endocrino”. Solo se habla de “mi médico de Familia”. Es una relación de cercanía que forma parte de tu vida".
