El portavoz Hong Lei añadió, no obstante, que "China sostiene que hay que levantar las sanciones que pesan contra Myanmar y promover la estabilidad y el desarrollo del país". El viaje de Clinton persigue afianzar un cambio de estrategia política que ofrece a Estados Unidos la oportunidad de enderezar sus relaciones con este país rico en recursos naturales y que tiene a la vecina China como principal nación aliada.
"Creo que los países occidentales y Myanmar deberían reforzar sus contactos y relaciones mutuas sobre la base del respeto mutuo", agregó el funcionario chino en rueda de prensa.
Según los analistas, la visita de Clinton indica un acercamiento entre EEUU y Birmania, en detrimento de su tradicional aliado, China, y también su principal inversor, aunque en los últimos meses han aumentado las disputas entre ambos países vecinos debido a la baja calidad de esta inversión.
En los últimos meses Washington intenta potenciar su influencia en el Sudeste Asiático e incluso ha intervenido en la disputa que China, Taiwán, Brunei, Malasia, Vietnam y Filipinas mantienen sobre la soberanía de las islas Spratly, en el mar de China Meridional, y con cuantiosos yacimientos de gas y petróleo.
China ha protagonizado duros enfrentamientos este año con Vietnam y Filipinas sobre la soberanía del archipiélago. "Creemos que la interferencia de un país exterior sólo complica más los problemas", respondió el portavoz Hong ante la actitud de Washington sobre el conflicto en el mar de China Meridional.
El asunto, prosiguió el funcionario, debe ser resuelto directamente entre los países concernidos y a través del diálogo, agregó.
Según el departamento de Estado de EEUU, Clinton pedirá a Birmania que aclare si mantuvo un comercio ilícito de armas nucleares con Corea del Norte, otro tradicional país protegido por Pekín, después de que Washington bloqueara el tráfico de navíos norcoreanos bajo sospecha de transportar el armamento atómico.
Está previsto que Clinton pida a los líderes birmanos que suscriban el protocolo del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) para permitir las inspecciones internacionales.
En este sentido, el portavoz chino señaló que su país "siempre mantiene que los firmantes del Tratado de No Proliferación deberían tener derecho al uso civil de la energía nuclear. Y al mismo tiempo, estos países deberían cumplir con sus compromisos de no proliferación", concluyó Hong.