Blindar las obras del AVE vasco. Esa era la principal condición del PNV para respaldar los Presupuestos Generales del Estado. Y el Gobierno de Pedro Sánchez ha cedido. El acuerdo anunciado por los peneuvistas este viernes supone que las instituciones vascas ejecutarán los trabajos para que la alta velocidad llegue a Vitoria y Bilbao. Después, el estado pagará por la vía del cupo.
En puridad, este acuerdo no resulta sorprendente. Porque los propios gobiernos central y vasco ya daban por hecho que esto sucedería hace un mes. Fue entonces, como recogió Vozpópuli, cuando ambos desvelaron que la figura elegida sería la "encomienda de gestión". Esto es, el Ejecutivo autonómico se ocupa de hacer las obras y después cobra al Gobierno central a través de un descuento en el cupo.
Con el pacto anunciado este viernes, se blinda la realización de esas obras de una infraestructura que acumula años y años de retraso.
A raíz de los pactos entre el Ejecutivo y Bildu, en el PNV tenían ganas de anunciar este acuerdo. Así aseguran que ha logrado "un acuerdo histórico" para el acceso del Tren de Alta Velocidad (TAV) a Vitoria-Gasteiz y Bilbao en las negociaciones que mantiene con el Gobierno de Pedro Sánchez, según recoge Europa Press de fuentes jeltzales.
Los detalles de este acuerdo los ha dado conocer este mismo viernes el portavoz del Grupo Vasco en el Congreso, Aitor Esteban, en la estación de tren de la capital alavesa. Además, Esteban ha desvelado que la negociación presupuestaria sigue abierta. Acompañaban al diputado jeltzale en la comparecencia, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar; el presidente del Araba Buru Batzar (ABB), José Antonio Suso; y la portavoz del PNV en el Senado, Estefanía Beltrán de Heredia.
