El PP ha rechazado hoy crear una ponencia encargada de abordar la reforma del Tribunal de Cuentas, una iniciativa de Unidos Podemos respecto de la que el PSOE se ha abstenido tras anunciar que los socialistas presentarán en los próximos meses su propia reforma legislativa para este órgano.
La Comisión Mixta para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas, reunida en el Congreso, ha desestimado además otras dos propuestas de Ciudadanos con las que la formación naranja pretendía reforzar la independencia de la institución y acabar con el "nepotismo" en su seno.
El debate ha dejado patente las discrepancias en la forma de encarar una posible modificación de la estructura y funciones del Tribunal de Cuentas, ya que mientras el PP ha dejado claro que ve suficiente su actual estatus tras las últimas reformas aprobadas, el PSOE entiende que sí debe ser mejorado con cambios legales, línea en la que el resto de la oposición quiere profundizar con una ponencia.
De hecho, lo que Unidos Podemos ha planteado es abordar ya esa reforma "ineludible" mediante una ponencia, porque, según su diputado Segundo González, "la sombra de la duda sobrevuela el Tribunal de Cuentas y esto es algo que la democracia no se puede permitir".
Ha aludido a las diversas sentencias del Tribunal Supremo que han constatado en los últimos años irregularidades en la contratación de personal y nombramientos de altos cargos y, además, ha cuestionado el sistema de elección de los consejeros del órgano fiscalizador, cuya independencia está a su juicio en entredicho.
Han respaldado la idea de la senadora del PNV Dolores Etxano, para quien es "oportuna" la creación de un grupo de trabajo que abra el debate sobre esta "necesaria" reforma, y Ciudadanos, cuyo diputado Saúl Ramírez ha destacado que el Supremo ha llegado a hablar de "nepotismo" en el Tribunal de Cuentas.
Unos apoyos insuficientes para que saliera adelante porque el PSOE se ha abstenido al preferir que la reforma se debata mediante un texto legislativo concreto como el que presentará próximamente, y el PP la ha rechazado.
El senador del grupo popular Francisco Javier Fernández ha argumentado que la institución funciona de manera "aceptable" con una "legislación adecuada" tras unas reformas cuyo alcance aún es "pronto" para evaluar, y ha afirmado que las anomalías de funcionamiento detectadas por el Tribunal Supremo "se resuelven dentro del propio ámbito judicial" sin necesidad de una subcomisión.
Menos respaldo aún han tenido las dos proposiciones no de ley presentadas por Ciudadanos para instar al Gobierno a promover la reforma de la ley del Tribunal de Cuentas y de otras normas que ayudarían a reforzar el deber de colaboración con la institución.
La propuesta de Ciudadanos para reformar el Tribunal es para el diputado socialista Antonio Hurtado "inoportuna, irresponsable y corporativista"
En opinión del diputado Saúl Ramírez es un órgano "terriblemente politizado" en manos del PP y PSOE que debe renovarse, mientras para el senador del mismo grupo Vicente Ten es preciso modificar las leyes que excluyen a algunas entidades públicas, como la Agencia Tributaria, del deber de colaboración con el Tribunal.
La propuesta de Ciudadanos para reformar el Tribunal es para el diputado socialista Antonio Hurtado "inoportuna, irresponsable y corporativista", mientras que a juicio de Joan Mena, de Unidos Podemos, sería más "riguroso y adecuado" abordarla mediante la ponencia propuesta por este grupo.
El grupo popular la ha rechazado de plano por innecesaria y por partir de premisas inexactas; su portavoz Francisco Javier Fernández ha defendido el actual procedimiento de elección de los consejeros por el Parlamento así como la independencia con la que actúan.
En cuanto a la otra proposición no de ley que pretendía perfeccionar el deber de colaboración con el órgano fiscalizador, la senadora del PNV Dolores Etxano ha llegado a decir que no aportaba "ninguna novedad".
Para Ferran Martínez, de Unidos Podemos, es un "copia-pega" de una exhaustiva moción aprobada por el mismo tribunal sobre la misma cuestión, algo que también ha constatado la socialista Ana María Botella, que la ha calificado de versión "comprimida y light" del documento del tribunal, en tanto que el portavoz del PP la ha desestimado por "obsoleta" y por pedir reformas ya aprobadas.