El titular de Hacienda y de Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, pretende llevar, esta vez sí, la reforma local al Consejo de Ministros del próximo viernes, aunque las medidas que se aprueben no serán de aplicación hasta el 1 de enero de 2014. Esto se hace extensivo tanto a la cuestión competencial como al baremo salarial de los alcaldes, el número de eventuales o nombrados a dedo, así como el porcentaje de concejales que tendrán dedicación exclusiva y, por tanto, cobrarán, del erario público.
Respecto al salario, se confirma que, como máximo, los alcaldes podrán cobrar lo mismo que un secretario de Estado, que entre sueldo, complementos y pluses puede ponerse en cerca de los 100.000 euros anuales. Respecto a los liberados, serán el 80 por ciento en los grandes municipios y de poco más de 60 por ciento en los medianos, y de ahí se irá reduciendo. No se ha cerrado formalmente el número de eventuales, pero según adelantó Vozpopuli, un alcalde no podía tener más de cinco asesores.
Otra cosa es el recorte en el número de concejales. El presidente de la FEMP, que ha comparecido ante los medios de comunicación tras la reunión de la Junta de Gobierno de la Federación, Íñigo de la Serna, ha admitido que creen que no debe tocarse este concepto, en lo que hay pleno acuerdo con el PSOE. La última palabra la tiene el ministro, pero cabe recordar que esta medida no podrá aplicarse hasta la celebración de las elecciones locales del año 2015.
Además, De la Serna ha sido tajante a la hora de asegurar que "ningún alcalde se subirá el sueldo" al socaire de la reforma, sino de lo que se trata, muy al contrario, es poner topes máximos que antes no existían.