El Congreso de los Diputados recortará en 2013 su presupuesto por cuarto año consecutivo, esta vez un 3,22%, y el mayor esfuerzo de austeridad será en gastos protocolarios y de representación, que caen un 40%. Fuentes de la Mesa de la Cámara han declarado a la agencia EFE que el presupuesto global que este órgano aprobará el próximo martes asciende a 84.146.000 euros, lo que supone una reducción acumulada de casi el 18% en cuatro años.
Los diputados continuarán en 2013 con su salario congelado de forma que el sueldo base continúa en 2.813 euros brutos al mes, a los que suman 1.823 euros para los de fuera de Madrid y 870 euros para los electos por la capital, así como otros complementos según sus funciones en la Cámara.
Tampoco este año el Congreso hará ninguna aportación a los planes de pensiones de los parlamentarios ni a los seguros colectivos, algo que ya se dejó de hacer el pasado ejercicio, y de igual manera se mantienen las subvenciones a los grupos parlamentarios.
Aparte del importante tijeretazo que sufren los gastos protocolarios, el capítulo de inversiones reales, por ejemplo en adquirir mobiliario nuevo, baja hasta un 27%. En cambio no se toca la cuantía destinada a la modernización.
Por su parte, las cuentas del Senado se contraerán en torno a un 2% en 2013, una cifra en la franja que se mueve las del Congreso y sustancialmente inferior a la caída que experimentarán los presupuestos de los ministerios, que se recortarán el 12,2%.