¿Hay algo más apetecible en verano que un buen aperitivo después de la piscina o la playa?. Y, aunque no haya actividades acuáticas, el verano siempre nos regala tranquilidad, laxitud y despreocupación, lo que resulta óptimo para organizar esos aperitivos largos, sin prisas…
Hemos hecho una selección de tres vinos con los que acertarás e irás sobre seguro si se trata de lograr las mejores armonías. Un cava que tiene mucho que ofrecer, una manzanilla pasada que nos llega de Sanlúcar (no podía faltar un vino generoso, son maravillosos para el verano) o un rosado de gran personalidad inspirado en los elaborados en Provenza.
Cualquiera de ellos hará un gran papel para disfrutar de esa antesala de la comida tan divertida y variada, aunque los tres harán también pueden ser los protagonistas en la mesa. Por ejemplo, la manzanilla pasada (en general) resulta maravillosa con un ajo blanco, el cava resaltará los pescados al horno y los rosados van muy bien con ensaladas de pasta o verdes (siempre que éstas últimas no tengan demasiado vinagre).
1) Mirgin Blanco Reserva 2020
Un cava de ‘Guarda Superior’, brut nature (sin azúcares añadidos), que es perfecto para un aperitivo. Con una excelente relación calidad- precio, es el cava más sencillo de Alta Alella, una bodega que nos tiene acostumbrados a grandes alegrías. La familia Pujol- Busquets, sus propietarios, siempre mantienen el pabellón muy alto y éste, a pesar de su pretendida 'sencillez' (estamos hablando de un Reserva) resulta todo un primor.
Está elaborado con Pansa Blanca (Xarel.lo), parellada y macabeo cultivadas en ecológico y sale al mercado tras una crianza de entre 20 y 40 meses. Fresco, mediterráneo con toques minerales y cierta salinidad final, también aguantará estupendamente una comida, como decíamos. Aunque hablando de aperitivos, será el compañero ideal de mariscos, mojamas, conservas (desde mejillones en escabeche a navajas) o quesos de pasta, desde un brie a un camembert. PVP recomendado: 14,40 euros.
2) Manzanilla Maruja Pasada
Un vino que permaneció más tiempo de lo habitual sometido a crianza. Son las manzanillas pasadas, en las que el velo de flor se debilita por el envejecimiento más prolongado y deja pasar algo de oxígeno, lo cual le otorga ciertos toques de oxidación. Un tipo de vino que es una de las joyitas de Sanlúcar. Este ‘Maruja pasada’ está elaborada con uva palomino fino y posee una edad media de 15- 20 años. Hay dos sacas al año.
Procede de la última solera de la originaria Manzanilla Maruja y para su elaboración se siguen los métodos más tradicionales de las antiguas manzanillas sanluqueñas. Bonito color dorado, inevitables toques yodados profundos, es muy salina y cremosa. Imprescindible tomarla fresca y dejar que se abra en la copa poco a poco para poder disfrutarla en toda su extensión. Excelente para jamón ibérico, ensaladilla con gambas, salmón ahumado, mojamas…
3) Chivite Las Fincas Rosado 2023
Desde Navarra nos llega este vino elaborado con garnacha y tempranillo. Inspirado en el estilo provenzal, se elabora mediante sangrado (breve maceración del mosto en sus hollejos). Un vino moderno, actual y delicado que sin embargo sorprende por su personalidad y persistencia. A la añada anterior el gurú del vino Tim Atkins le otorgó 92 puntos.
¿Qué encontramos en la copa?. Un rosado delicadamente aromático, fresco, con una pronunciada acidez que resulta perfecta, frutal… Frescor al primer sorbo para luego poder descubrir muchos más matices. Es idóneo para langostinos, canapés o mediasnoches de espárragos con mayonesa, empanada de atún o hummus.
Tres vinos ideales para descorchar en verano, aunque también en cualquier estación del año o momento ya que, en sus categorías, son creaciones con las que no te equivocarás.
