El Gobierno de Estados Unidos ha autorizado a los empleados no esenciales y a las familias de todos los empleados a abandonar el consulado de Almaty, en Kazajistán, por la situación de inseguridad que se vive en ese país, según un comunicado emitido por el Departamento norteamericano de Estado.
Según este comunicado, tal y como está la situación en Kazajistán "pueden producirse manifestaciones, protestas y huelgas de manera rápida y sin notificación previa" que pueden adquirir rápidamente un carácter violento.
Las protestas, según el comunicado, pueden provocar la interrupción del tráfico, el transporte y las telecomunicaciones y "afectar gravemente la capacidad de la embajada de EEUU para brindar los servicios consulares necesarios", entre ellos "la asistencia a los ciudadanos estadounidenses que salen de Kazajistán".
La Casa Blanca ya expresó este viernes su preocupación por la orden del presidente de Kazajistán, Kasim-Yomart Tokáyev, de "disparar a matar" contra los manifestantes en el país y advirtió de que se mantendrá alerta ante cualquier abuso de derechos humanos.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, también se refirió a la crisis en Kazajistán durante una rueda de prensa este viernes, en la que urgió a resolver la crisis sin dejar de "respetar los derechos" humanos.
Las autoridades kazajas mantienen su pulso con los manifestantes que han protagonizado graves disturbios en la nación centroasiática durante las últimas cuatro jornadas.
Aunque el primer subdirector de la Administración Presidencial Daurén Abáyev afirmó este viernes que "el orden se ha restablecido en todo el país y la situación se ha estabilizado", todavía persisten los focos de resistencia de los manifestantes, atrincherados en diversas partes del país, según medios locales.
El Ministerio del Interior kazajo informó de 26 manifestantes muertos y otros 26 heridos, y de que 3.211 personas han sido detenidas, cifras que podrían crecer en las próximas horas.
El número de muertes de uniformados se mantiene en 18 y la cifra de policías heridos ascendió a 740.