Marcó toda una época en su momento, un modelo que combinaba una línea elegante basada en la carrocería familiar con un motor y una puesta a punto del bastidor desarrollados para ofrecer las más altas dosis de deportividad. El RS2 Avant fue el primer modelo RS de la marca alemana, y fue desarrollado en colaboración con Porsche, que se encargaba del montaje final en la factoría de Stuttgart-Zuffenhausen.
Su aspecto exterior, aunque nada exagerado en adornos superfluos, dejaba entrever lo que escondía luego en su interior. El paragolpes delantero contaba con enormes entradas de aire, y la rejilla estaba acabada en color negro. Los retrovisores exteriores era de origen Porsche, la zaga contaba con una ancha banda luminosa que unía los grupos ópticos, y los anagramas RS eran de gran tamaño. El color azul de la carrocería era una opción, y era parte de un homenaje a las dos victorias conseguidas en el circuito de Nogaro en el Campeonato Francés de Turismos en 1993.
El RS2 Avant fue el origen de toda una familia de deportivos que han marcado la personalidad de la marca de los cuatro aros
El motor del RS2 procedía directamente de la competición, un 5 cilindros de 2,2 litros que anunciaba una potencia máxima de 315 CV gracias a la utilización de un turbocompresor de grandes dimensiones con una elevada presión de sobrealimentación, conductos de aire sobredimensionados, y una gestión electrónica específica que le permitía girar hasta un régimen máximo de 7.200 rpm. El RS2 aceleraba de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos, alcanzaba una velocidad máxima de 262 km/h y disponía, por supuesto, con la exclusiva tracción total quattro, una de las señas de identidad de Audi en aquel momento.
En el interior respiraba igualmente una gran personalidad, marcada por los asientos Recaro de cuero napa seda y Alcantara en color antracita, azul o gris plata. El cuadro principal de instrumentos contaba con esferas blancas, y los pequeños relojes adicionales en la consola central mantenían informado al conductor sobre la presión y la temperatura del aceite del motor. Un modelo tan exclusivo como su precio entonces, unos 55.000 euros al cambio actual, que se fabricó durante apenas dos años en los que se produjeron apenas 2.908 unidades.
20 años después, para conmemorar el inicio de esta familia de modelos tan especiales para la marca, se pondrá a la venta una serie limitada a partir de abril bautizada como RS 4 Avant Nogaro, con un precio casi el doble de lo que constaba entonces el RS2, 101.200 euros, y el mismo color azul de carrocería que caracterizaba al RS2 original.
Bajo el capó, monta un motor V8 atmosférico de 4,2 litros que desarrolla 450 CV y es capaz de girar hasta casi las 9.000 rpm, permitiendo acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y de alcanzar una velocidad máxima limitada electrónicamente a 280 km/h. Monta, al igual que el RS2 de hace 20 años, el sistema quattro de tracción total, que distribuye el par en una proporción de 40:60 entre los ejes delantero y trasero aunque puede variar hasta un máximo del 70 por ciento de la fuerza del motor al eje delantero, y un máximo del 85 por ciento en el caso del eje trasero.