Los dos socios principales de La Fábrica de la Tele han anunciado este martes la ruptura de su relación con Mediaset España tras 17 años en el negocio. Lo han hecho en el momento más complejo de la historia de la productora, después de que la propietaria de Telecinco pusiera fin a Sálvame y a sus distintos formatos; y tras el fracaso de su última gran apuesta, Cuentos chinos, de Jorge Javier Vázquez.
A partir de ahora, Mediaset España, Adrián Madrid y Óscar Cornejo iniciarán un proceso de negociación para decidir el futuro de la sociedad -de la que poseen una tercera parte por cabeza-, lo cual podría conducir hacia su liquidación, han explicado fuentes cercanas a la productora.
En las próximas semanas, se abordará el futuro de los tres programas que mantienen con Mediaset, que son Socialité, Todo es mentira y Viajando con Chester. En las últimas semanas, se ha hablado de la posibilidad de que Risto Mejide realice estos dos últimos con su propia productora.
De momento, no han trascendido muchos detalles sobre el futuro de la empresa. El comunicado que han difundido ha sido escueto y afirmaba lo siguiente: "Tras 17 años de grandes éxitos, los accionistas de La Fábrica de la Tele (Mediaset España de un lado, y Adrián Madrid y Óscar Cornejo de otro) han acordado poner fin a su relación societaria, habiendo iniciado ya el proceso con tal finalidad".
El fin de esta relación contractual sitúa una enorme incógnita sobre el futuro de La Fábrica de la Tele. Primero, porque Mediaset dispone del 30% de las participaciones y, segundo, porque sus ingresos dependían en su inmensa mayoría del grupo de los Berlusconi. Según la información que figura en el Registro Mercantil, esta productora ingresó en 2021 un total de 32,9 millones de euros y obtuvo un beneficio de 5,2 millones de euros. Un año antes, había facturado 29,1 millones y declarado unas ganancias de 4.
Hace dos años, en plena pandemia de covid-19, el 98% de los ingresos de la compañía de Óscar Cornejo y Adrián Madrid procedían de Mediaset España, frente al 95% del año anterior.
Operación Deluxe
Conviene recordar que existe un proceso judicial pendiente sobre esta productora y sus socios, conocido como 'Operación Deluxe', en el que se investiga el presunto tráfico de información sobre diversos rostros conocidos, muchos de los cuales eran habituales en los contenidos de Sálvame y sus diferentes versiones.
La causa se inició en 2018 después de que se hallaran indicios de una posible filtración de datos policiales confidenciales a periodistas del programa Sálvame.
Unos meses después de que el caso saltara a la prensa, Mediaset decidió prescindir de este programa, lo cual supuso un mazazo para su productora. La retirada de la parrilla de estos magacines se realizó en un momento de crisis de audiencias de Telecinco -de la que todavía no se ha recuperado- que también afectó a estos espacios.