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Históricos fracasos televisivos de Bertín Osborne

Es uno de los personajes más televisivos del momento, desde que TVE decidiera confiar en él para ponerle al frente de ‘En la tuya o en la mía’, un programa de entrevistas, a pesar de que lo conocíamos principalmente por concursos para toda la familia. Sin duda, 2015 ha sido uno de los mejores años profesionales en la trayectoria de Bertín Osborne, cantante andaluz que se reconvirtió en estrella de la pequeña pantalla hace ya más de dos décadas. Pero no fueron todo éxitos lo que cosechó antaño en su carrera televisiva. Lo recordamos.

  • Bertín en su etapa de máximo esplendor (Gtres)

En la tuya o en la mía ha sido una de las apuestas más exitosas de Televisión Española de la actual temporada, un espacio donde Bertín acudía a casa de famosos –o estos a la del propio Osborne– para hablar de lo divino y lo humano. El formato, similar a lo que se hace en Al rincón o en Viajando con Chester, ha calado tanto que cada miércoles lidera las noches de televisión, ayudado por el gancho que supone tener a Pablo Alborán o Carmen Martínez Bordiú contando sus secretos más íntimos.

Sin embargo, Bertín no siempre ha saboreado las mieles del éxito ni ha tenido ese respeto que ahora se le tiene, con programas que recibieron críticas por todas partes o que sencillamente el público dio de lado.

Contacto con tacto

Pocos lo recuerdan ya, pero Bertín comenzó su andanza catódica en Telecinco, en un programa que bien podría considerarse una precuela de ‘Mujeres y hombres y viceversa’. Hablamos de ‘Contacto con tacto’, estrenado en 1992, y que el de ‘Señora’ presentaba despachurrado en un sofá, que ríete tú de la poca compostura que hay en ‘Sálvame’. Pero su forma canalla de hacer de maestro de ceremonias caló y bien entre los espectadores.

La batalla de las estrellas

Antes de Tu cara me suena o Furor ya veíamos a famosos competir cada semana en ‘La batalla de las estrellas’, uno de los máximos exponentes de aquel Telecinco cabaretero de los noventa. Duró dos temporadas, y Bertín formaba equipo con Natalia Estrada y dos invitados que iban cambiando, y competían contra Jordi LP (¿le recuerdan?) y Carmen Russo –sustituida después por Loreto Valverde–. Por allí pasaron famosos de la época que más tarde serían auténticas estrellas mediáticas, como el simpar Jesulín de Ubrique.

Scavengers

De Telecinco Bertín Osborne pasó a Antena 3. Y nada más llegar a esta cadena se pegó de bruces con la audiencia en alguna ocasión, como es el caso de ScavengersUna nave espacial hacía las veces de plató, y un Bertín disfrazado de manera futurista era el comandante y daba las instrucciones oportunas a los concursantes. Su estreno no llegó al 15%, diez puntos por debajo de la media de la cadena.

La cara divertida

Antena 3 explotó el lado más simpático de Bertín Osborne con espacios como Lluvia de estrellas, o incluso Genio y Figura, el espacio de chistes en el que sustituyó a Pepe Carrol. Queriendo explotar su perfil humorístico también estuvo frente a formatos que nadie recuerda, como La cara más divertida, que no era más que un refrito de tomas falsas y vídeos domésticos. Con ese mismo espíritu también estuvo en Esos locos bajitos, programa donde un adulto entrevista a los niños, en la línea de Menuda noche de Juan y Medio en Canal Sur.

Mujer 10

Un Operación Triunfo para demostrar quién era la esposa más molona del universo: la más sensual, la que mejor cantaba y bailaba, y la que mejor era capaz de sumergirse en una piscina de barro para conseguir regalos. Eso fue Mujer 10, estrenado a inicios de milenio en Antena 3 y con Bertín de presentador. Sí, ustedes han olvidado su existencia, y Osborne reza para que esa amnesia continúe.

Grand Prix

Si alguien te pregunta cuál fue el presentador del Grand Prix responderás automáticamente que Ramón García; sin embargo, también podemos aceptar como bueno el nombre de Bertín Osborne, quien lo presentó en su versión autonómica y más desconocida.

Telenovelas varias…

El andaluz no solo canta y presenta, también es actor. Y cual Carlos Mata o Fernando Carrillo, Bertín hizo su incursión en el mundo de las telenovelas al otro lado del charco. Ya en 1990 participó en el culebrón Amor de nadie, donde tenía un tráfico final; su personaje, Óscar, acababa siendo asesinado. Un tiempo después, en 1997, regresaría a los culebrones encarnando a Andrés Kloszt en Alondra, capitán de un barco en el que viajaba la protagonista, interpretada por Ana Colchero.  Ahora retomará su faceta como actor junto a Paco Arévalo, con quien hará gira nacional con la obra Por humor al arte, secuela de Mellizos, la cual ya representaron juntos hace un lustro. 

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