La presentadora acudió a la inauguración de una la tienda de ropa y zapatos y allí nos habló de su ruptura con el jinete Álvaro Muñoz Escassi: “Hoy leía en una revista que rompí en marzo. ¡Ya no sé qué hacer, da igual lo que cuente porque van a decir lo que quieran! Yo llevo ya cuatro meses sola, feliz y tranquila. Aunque a la gente le cueste entenderlo he tenido una ruptura amistosa, con Álvaro tengo muy buena relación. Entendimos que éramos mejores como amigos que como pareja y así es”.
Sonia Ferrer comentó que suelen verse de vez en cuando porque “me gusta verle y saber que está bien” y se llaman para que él le cuente qué tal le han ido los concursos y él le pregunta por su hija Laura, fruto de su relación con el cirujano plástico italiano Marco Vricella: “Álvaro me pregunta por la niña, a la que quiere un montón y ella le quiere muchísimo también a él”.
Los motivos de la ruptura con Escassi
Respecto a cuáles fueron los motivos de la ruptura, la catalana negó que fuera por infidelidad y apuntó a que la relación no iba bien: “Él y yo sabíamos que no funcionaba. Además, él volvió a la hípica en verano y le hacía estar constantemente de viaje. Y si la relación ya tiene problemas y cojea, con esto hace que se rompa del todo. Yo sé lo que no quiero en mi vida y es una relación a distancia porque ya la tuve [con Marco Vricella] y sé que no funciona. Yo no quería eso ni se sostenía.” y añadía: “Lo de las infidelidades que yo sepa no las ha habido. Desde luego si mi relación no ha funcionado no ha sido por eso porque si no, mi ruptura hubiese sido dramática.
A pesar de esta ruptura, Sonia declaró que sigue creyendo en el amor: “Con la edad que tengo, que soy muy joven, si ya no creyese me podía tirar de un puente. Creo que estar enamorada es fantástico y es una situación ideal. También tengo mucho amor a mi alrededor por mi hija, por mi trabajo, mis amigos… Y creo que una mujer puede estar perfectamente sola y un hombre también sin ser un drama”.
A Sonia no le importa que Escassi esté ya con otra mujer
Sin embargo, Escassi parece llevar peor el estar solo ya que hace unos días se le fotografió en el Madrid Open junto a una mujer rubia, ante lo que Sonia declaró que no la conoce pero que guarda buenos sentimientos hacia el jinete: “Me alegro muchísimo por él, yo le tengo muchísimo cariño. Si él es feliz y ha encontrado una persona con la que empezar una relación, yo estoy contenta por él. No le vamos a condenar por eso. Me parece fenomenal y lo más natural. Hablé con él y me dijo que se lo pasó bien en el tenis y que está muy bien”. De hecho, Sonia ha tenido tiempo para reflexionar sobre la ruptura: “Creo que la separación se fue generando mientras estábamos juntos, es la explicación que le encuentro a que no me duela y me alegre si le veo con otra chica”.
La presentadora y su exmarido continúan con batallas judiciales
Con el que no consigue mantener una buena relación es con Mario, su exmarido y padre de su hija: “La relación es nula, igual que ha estado siempre. Nos escribimos a menudo porque tenemos una niña y hay que aclarar temas. Pero no somos amigos. Hay un recurso puesto y hay que esperar al resultado. Yo sinceramente espero que con el tiempo todo vuelva un poquito a la normalidad, por lo menos que se tranquilice y tengamos una relación cordial porque los dos sabemos qué es lo mejor para nuestra niña y en el fondo queremos lo mejor para ella.
Su deseo es que llegue el día en el que consigan enterrar el hacha de guerra y tener una “buena relación”. Sonia y Marco se separaron en 2013, después de seis años de matrimonio, y aún tienen asuntos judiciales pendientes, entre ellos la custodia compartida que dictaminó el juez a favor de Marco y con la que ella no está para nada de acuerdo: “Estamos en una época en la que está muy de moda. Yo estoy muy a favor de ésta pero lo que no comparto es la idea de la justicia de empezar la casa por el tejado e imponer una custodia compartida cuando las tareas no se han repartido al 50% y los hombres no se han responsabilizado al 50% con sus hijos como en mi caso, con un hombre que estaba constantemente de viaje y yo era la que me he ocupado de la niña. No me parecía justo porque en un divorcio lo que tiene que cambiar lo menos posible es la vida del menor.
Al margen de estos problemas judiciales y de la ruptura, Sonia se encuentra muy feliz de haber vuelto a trabajar a Televisión Española: “Estoy encantada y muy contenta porque he vuelto a mi casa, que es donde crecí personal y profesionalmente porque empecé con 22 años y estuve ocho. Ha sido una vuelta a casa”.
El hecho de que tenga 37 años también le hace llevar la vida de otra manera, incluso no le teme al paso del tiempo: “Cada vez me preocupo menos por mi aspecto físico. Con los años una va ganando en seguridad, ya no te acomplejan tantas cosas y estás más satisfecha con lo que tienes. Voy al gimnasio pero creo que por cuestiones de salud y porque estar en forma siempre es bueno”.
Rosa Benito y Mila Ximénez enmudecieron al llegar al evento
Otras famosas que también asistieron al acto fueron Mila Ximénez (que no se quitó las gafas de sol en el interior de la tienda según comentó por estar mal por la alergía) y Rosa Benito que debe ser que después de hablar tantas horas en Sálvame, al llegar allí enmudecieron. Esta última se mostró muy antipática cuando los medios de prensa escrita trataron de entrevistarla después de que lo hicieran las agencias de televisión. La cuñada de la fallecida Rocío Jurado respondía así: “Esa pregunta ya le he contestado, no voy a volver a repetir lo mismo”. A los pocos minutos, cogió un regalo que le dio la dueña de la tienda y se marchó. La colaboradora de Sálvame debería haber tomado como ejemplo a la más grande, que siempre atendía a todos los medios sin esos aires de grandeza.