La versión híbrida del V60 llega por fin al mercado español —60.900€—, un modelo que introduce a la marca en el segmento de los híbridos con un producto de gama alta y que cuenta con una combinación poco extendida todavía, un motor Diesel con otro eléctrico, con tecnología además `Plug In´ que permite recargar la betería enchufándola directamente a la red convencional. Monta bajo el capó el motor Diesel más potente de la gama, el D5 de 215 CV, junto a otro eléctrico de 70 CV, gestionando la potencia final a través de una caja de cambios automática de seis velocidades.
Las baterías necesarias para alimentar al motor eléctrico están situadas bajo el piso del maletero, unas baterías de última generación de ion-litio que, a diferencia de los dos modelos de Peugeot —que comparten la misma tecnología—, pueden recargarse directamente a través de la red de 230 voltios, con un tiempo de recarga que puede llegar a variar entre cuatro y siete horas y media horas dependiendo de la instalación doméstica. Puede recorrer en modo completamente eléctrico hasta 50 kilómetros y anuncia un consumo medio homologado de sólo 1,8 l/100 km.
Durante la conducción, se puede elegir entre cinco programas de funcionamiento, «Pure», «Hybrid», «Power», «Save» y «AWD». En el primero de ellos funciona solo el motor eléctrico, en el segundo y tercero el Diesel y el eléctrico a la vez, aunque en este último buscando en todo momento el máximo nivel de prestaciones. Cuenta también con la posibilidad de reservar algo de la energía almacenada en la batería a través del modo «Save», útil cuando se va a circular próximamente en ciudad.
Las prestaciones que desarrolla están a la altura de lo esperado de un motor con semejante nivel de potencia, acelerando de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos, mejorando sensiblemente los 7,5 segundos que emplea el V60 con el mismo motor Diesel de 215 CV. Alcanza una velocidad máxima de 230 km/h, mientras que en modo eléctrico exclusivamente, puede llegar hasta los 120 km/h.
Como sucede en el 3008 Hybrid4, el nuevo híbrido de Volvo tiene tracción a las cuatro ruedas —activando el modo «AWD»— debido a que el motor Diesel mueve el eje delantero y el eléctrico el trasero. Al activar este modo de funcionamiento, el motor térmico se encarga de que siempre haya energía para el eléctrico siempre y cuando circulemos por debajo de 120 km/h.