Seguro que si has tenido un dolor de cabeza, un resfriado o un dolor menstrual has recurrido a algún medicamento para aliviarlo. Lo más probable es que habrás recurrido al ibuprofeno para calmar ese dolor. Este fármaco es uno de los más vendidos en nuestro país. Según los datos se pueden llegar a vender cada año más de 10 millones de envases. De hecho, en las farmacias se puede adquirir sin ningún tipo de restricción este fármaco en dosis pequeñas de 0,25 miligramos, 50 mg, 100 mg y 400 mg.
El ibuprofeno tiene una gran fama alrededor porque puede llegar a calmar cualquier tipo de dolor. O eso es lo que muchos creen. Este medicamento actúa como un analgésico que alivia y calma el dolor. También es un antiinflamatorio, ayuda a bajar la fiebre. Sin embargo, al ser un antiinflamatorio no esteroideos (AINE), el ibuprofeno tiene cientos de efectos secundarios.
¿Para qué casos se receta el ibuprofeno?
El ibuprofeno es un antiinflamatorio no esteroideo (AINE) derivado del ácido propiónico que tiene propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antipiréticas. Este medicamento se suele recetar para aliviar "el dolor, la sensibilidad, la inflamación y la rigidez ocasionados por la osteoartristis y la artritis reumatoide".
Estos no son los únicos casos en los que se utiliza. Como hemos dicho antes, suele aliviar los dolores moderados o leves. Aquí, Medline Plus: Biblioteca Nacional de Medicina recoge el dolor menstrual, la fiebre, los dolores de cabeza, muscular, dolor de espalda, etc.
Los efectos secundarios de este medicamento
Los efectos secundario del ibuprofeno son muchos. La lista es muy largo. Uno de los riesgos que es que las personas que tomen este medicamento tienen una posibilidad más alta de sufrir un "ataque cardíaco o un derrame cerebral que las personas que no toman estos medicamentos". Es importante recordar que este tipo de eventos pueden aparecer sin ningún aviso y llevar a la muerte. "El riesgo puede ser mayor para las personas que toman AINE durante mucho tiempo, o toman dosis más altas", recoge Medline Plus.
Una de las recomendaciones que hizo la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) era que se limitar el consumo de ibuprofeno en pacientes con enfermedades cardiovasculares graves. En el caso de estos pacientes, la entidad explica que no deberían tomar más de 2.400 miligramos al día. Aquí se incluyen personas con cardiopatía isquémica, insuficiencia cardiaca, enfermedad arterial periférica o cerebrovascular.
Tampoco se debería usar el ibuprofeno si se ha sufrido un ataque cardíaco recientemente, salvo que lo indique un médico. Tal y como explica Medline Plus, este tipo de medicamento puede provocar "úlceras, hemorragias o perforaciones en el esófago, el estómago o el intestino". Del mismo modo que el riesgo de ataque cardíaco, estos síntomas se presentan si advertencia y puede causar la muerte. En este caso, el riesgo es más importante si "tienen una edad avanzada, su salud es precaria, fuman o beben grandes cantidades de alcohol mientras toman ibuprofeno".
La AEMPS también notificó que se habían producido casos graves de "toxicidad renal, gastrointestinal y metabólica" cuando se había mezclado este medicamento con codeína. Entre las reacciones que se había notificado habían sido "perforaciones gastrointestinales, hemorragias gastrointestinales, anemia grave, insuficiencia renal, acidosis tubular renal e hipopotasemia grave tras el uso prolongado de esta combinación en dosis superiores a las recomendadas".
Otros efectos secundarios relacionados con el consumo abusivo del ibuprofeno son estreñimiento, gases, mareos, nerviosismo, distensión abdominal o zumbido en los oídos.
Por todos estos motivos, es importante tener en cuenta que para reducir las posibilidades de sufrir alguna de estas consecuencias en nuestra propia piel se recomienda no automedicarse. Esto quiere decir que tan solo se tome el ibuprofeno bajo la supervisión de un médico.