Novo Nordisk y Eli Lilly son la cara más visible de los exitosos medicamentos para combatir la obesidad, pero no es oro todo lo que reluce, en la lucha contra la pandemia del XXI. De hecho las advertencias sobre beneficios que ya ha realizado la compañía danesa y la escasez de fármacos que ha llevado a la gloria de sus 'imitadores' puede limitar, junto con el potencial fracaso de alguno de sus ensayos puede convertir en carbón sus expectativas, al menos, en el rabioso corto plazo

Novo Nordisk y Eli Lilly son la cara más visible de los exitosos medicamentos para combatir la obesidad, pero no es oro todo lo que reluce, en la lucha contra la pandemia del XXI. De hecho las advertencias sobre beneficios que ya ha realizado la compañía danesa y la escasez de fármacos que ha llevado a la gloria de sus 'imitadores' puede limitar, junto con el potencial fracaso de alguno de sus ensayos puede convertir en carbón sus expectativas, al menos, en el rabioso corto plazo

El objetivo debe ser conseguir reactivar la vida social y económica a la mayor celeridad posible, manteniendo la expansión de la enfermedad en niveles que no sobrecarguen nuestro sistema sanitario