Canon 1100D
Su sensor con 12 megapíxeles y la grabación de vídeo en HD, la convierten en una de las mejores cámaras para iniciarse en la fotografía réflex. Tiene un sistema de 9 puntos de enfoque, pesa aproximadamente 495 gramos y tiene una pantalla de 6,8 centímetros (2,7 pulgadas). Su amplio rango de sensibilidad ISO (desde 100 a 6400) te permitirá grabar y hacer fotografías cuando haya poca iluminación, pero obteniendo calidad de imagen y control sobre el ruido. Puedes disparar hasta 3,2 fotogramas por segundo, lo que te permitirá captar con todo detalle objetos que se mueven rápido. Además, la EOS 1100D es compatible con más de 60 objetivos de la casa Canon, por lo que las limitaciones para tener un buen equipo sólo estarán en tu bolsillo. Puedes empezar desde 399 euros.
Nikon D3200
La Nikon D3200 está provista de un sensor de 24,2 megapíxeles y viene acompañada de un objetivo estabilizado, que te permitirá obtener fotos y vídeos de gran calidad (sistema Full HD). Es compatible con un adaptador wifi para smartphone, por lo que podrás compartir tus vídeos y fotos al momento de haberlas hecho. Tiene un sistema de autofoco de 11 puntos, que junto con la posibilidad de disparar 4 fotogramas por segundo, harán que no se te escape ni la expresión más fugaz. En cuanto a la sensibilidad ISO (desde 100 a 6400), incorpora un ajuste automático, que se puede ampliar hasta 12800. Pesa aproximadamente 505 gramos y la puedes encontrar desde 449 euros.
Sony A58K
El sensor de 20,1 megapíxeles de la Sony A58K junto con el visor Tru-finder OLED te permite modificar al momento los ajustes de la cámara y de la exposición, para mostrar con total precisión cómo será el resultado final de la foto. Sus 15 puntos de enfoque y su ráfaga de 8 fotogramas por segundo, capturará cualquier detalle, por pequeño y rápido que sea. Captura vídeos Full HD y su sensor ofrece un amplio rango de sensibilidad ISO (100–16.000), para que todas tus imágenes sean vívidas, incluso con escasa luz. 389 euros.