Tres agentes de la Policía rusa se desplazarán a Bilbao para colaborar con la Ertzaintza en el dispositivo de seguridad desplegado con motivo del partido de fútbol que este jueves enfrentará al Athletic Club de Bilbao con el Spartak de Moscú, según ha informado el Departamento vasco de Seguridad.
La Ertzaintza ha establecido un dispositivo especial de seguridad en torno al encuentro de fútbol integrado por 500 agentes de la Policía vasca, a los que se sumarán 100 policías municipales y 200 personas de seguridad privada del Athletic.
El dispositivo se puso en marcha este miércoles, un día antes del partido, coincidiendo con la llegada del grueso de los seguidores del conjunto ruso a Bilbao. La directiva moscovita ha solicitado las 2.500 entradas previstas por la normativa UEFA, pero serán más los seguidores que lleguen a Bilbao, ya que varios centenares más se desplazarán a Bilbao desde diferentes lugares de la península en los que residen habitualmente, especialmente el levante y el sur.
Desde anoche la tensión en la calle a temor de que se produzcan enfrentamientos es evidente.
Dispositivo de seguridad
La Ertzaintza ha preparado un dispositivo de seguridad encaminado a preservar la seguridad ciudadana durante los próximos días, tanto en el conjunto de la ciudad como, especialmente, en los aledaños del campo y en su interior antes, durante y después del partido.
Para ello, se han llevado a cabo diversas reuniones entre responsables de la Ertzaintza, la Policía Municipal de Bilbao y la seguridad del Athletic, así como con la Policía rusa, tres de cuyos agentes estarán presentes en la capital vizcaína para colaborar 'in situ' en las medidas de control de su afición.
La Policía de Moscú ha colaborado también para difundir entre los seguidores del Spartak los consejos de seguridad transmitidos por la Ertzaintza, incluidas las rutas por las que deberán acceder a San Mamés.
También se han difundido una serie de consejos a través de las asociaciones de comerciantes y de hostelería en la línea de evitar servir bebidas en vasos de cristal o en botellines, y retirar el mobiliario de terrazas ante posibles incidentes.
Al margen de las medidas de vigilancia en el conjunto de la ciudad, el dispositivo hará especial hincapié en los accesos al campo y en sus aledaños. El control de entrada a San Mamés será riguroso, por lo que se recomienda a quienes acudan que lo hagan con suficiente antelación para evitar aglomeraciones.
Desde Interior recuerdan la imposibilidad de introducir objetos prohibidos por la Ley del Deporte, tales como bengalas, petardos y botes de humo. Quienes porten dichos artefactos podrán ser objeto del correspondiente expediente sancionador y se les prohibirá su acceso al campo.
Además de los objetos peligrosos, se controlará también la posible presencia de pancartas u otros soportes con mensajes o símbolos ilegales o que inciten a la violencia y se impedirá el acceso de quienes se encuentren bajo los efectos de bebidas alcohólicas o drogas.
Ertzainas en Salzburgo
Por otro lado, cuatro agentes de la Ertzaintza se han desplazado a Salzburgo con motivo del encuentro entre el Red Bull Salzburg y la Real Sociedad, para colaborar con la Policía austriaca, varios de cuyos agentes han estado previamente en San Sebastián para coordinar con la Ertzaintza el dispositivo de seguridad del partido de vuelta.
El objetivo es velar por el normal desarrollo del encuentro y la seguridad de los 2.000 aficionados donostiarras que acudirán a Salzburgo.