El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha apostado este sábado por la "unidad", la "distensión", la "solidaridad" y el "diálogo" con los socios y aliados europeos para "resolver la crisis" con Rusia por Ucrania. Así lo ha manifestado en su cuenta de Twitter esta tarde, en un comentario donde ha afirmado que está "siguiendo muy de cerca" la situación en la antigua república soviética y se encuentra en "permanente contacto" con los líderes europeos.
Las palabras del líder del Ejecutivo llegan después de que esta misma mañana, en un mitin del PSOE en Asturias, evitase referirse explícitamente a la posición de Unidas Podemos sobre la crisis con Rusia. En los últimos días, el partido morado ha exhibido de forma clara su "No a la guerra", difundiendo incluso un manifiesto contra el envío de tropas a Ucrania. Este sábado, de hecho, su cofundador, Pablo Iglesias, ha aprovechado la precampaña electoral de las autonómicas de Castilla y León para atacar a la OTAN. El nuevo cisma en el Gobierno de coalición se desató tras el anuncio de la ministra de Defensa, Margarita Robles, de que se enviarán fragatas y otros operativos españoles a la zona.
Sánchez, en la misma línea, hizo el pasado lunes, durante la visita a España del canciller alemán, Olaf Scholz, un "llamamiento a la desescalada", así como al "respeto a las fronteras" y a la "integridad territorial" de Ucrania.
Esta misma mañana, la fragata española Blas de Lezo zarpó desde el puerto de El Ferrol rumbo al mar Negro, a donde llegará la próxima semana, como parte de la actuación española y europea ante la escalada de tensión entre Rusia y Ucrania. La unidad prevé integrarse en una de las agrupaciones navales de la OTAN en unas maniobras habituales que ya estaban previstas para este año y que las autoridades españolas han decidido adelantar con este motivo.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, avanzó ayer el envío de esta nave, después de que hace tras días partiera para la misma zona un cazaminas; según dijo la ministra, España lleva años participando en todos los despliegues que organiza la OTAN, y en este caso concreto se ha adelantado la salida de los buques, dentro de lo que ha acordado con la organización.
Rusia, que ha desplegado unos 100.000 soldados en la frontera con Ucrania, ha anunciado inminentes maniobras militares, lo que ha provocado la advertencia de Estados Unidos ante la posibilidad de una invasión de Ucrania, mientras la OTAN también realiza maniobras militares en la zona, en medio de una escalada de tensión.