La querida actriz Maggie Smith, conocida por sus papeles en las películas de Harry Potter y la serie Downton Abbey, entre otras, ha fallecido a los 89 años. La británica es de lo más querida entre los fanáticos de la saga mágica, que ya lamentan su pérdida y hablan del clásico gesto de dirigir sus varitas al cielo. La propia familia de la actriz ha sido la que ha dado a conocer el comunicado.
Toby Stephens y Chris Larkin, hijos de Smith, han sido los encargados de publicar la noticia. Tras aclarar que el fallecimiento ha sido "pacífico" y en un hospital, la comunidad internacional y seguidores de sus distintos papeles se hacen eco de la noticia. Además de haber interpretado a la famosa profesora y ser coprotagonista de una de las sagas más conocidas desde hace más de veinte años, Smith ha brillado durante más de 60 años en más de cincuenta películas.
De debutar en Broadway a ganar Globos de Oro
Artista de pies a cabeza, Maggie Smith debutaba en Broadway ya en 1952. A la vez que la misma reina Isabel II la nombraba 'dama' por su contribución a las artes interpretativas, la británica ha dedicado toda su vida a la actuación en interpretación. Nacida en Essex, Inglaterra, no solo ha participado en producciones televisivas y cinematográficas de lo más conocidas, sino que también ha estado subida a los escenarios. El ojo público, The Lady in the Van y Lettice and Lovage son algunas de las obras en las que brilló, sin olvidar La noche de reyes, actuación con la que debutaba en el mundo del teatro.
En la gran pantalla, Smith lograba el reconocimiento de la comunidad internacional con sus actuaciones en Nowhere to Go; que le regalaba una nominación al Premio BAFTA, Los mejores años de Miss Brodie; donde ganaba un Premio Óscar, o Té con Mussolini; donde se hacía con el premio a la Mejor Actriz. Así, la británica también formaba parte del telefilme Downton Abbey, con la que ganaba el premio a Mejor actriz de reparto de serie, miniserie o telefilme.
Harry Potter, la saga que ha marcado a toda una generación
Creada por la afamada autora J.K. Rowling, la saga de Harry Potter veía la luz en 1997. Después de que varias editoriales rechazaran el manuscrito, y tras el éxito de su publicación, la primera película era proyectada en la grande pantalla en 2001. Millones de niños y jóvenes alrededor del mundo crecían con la superproducción que años después seguiría teniendo la misma -o incluso más- expectación que en un inicio. Los fans se hacían eco de sus personajes favoritos, y las conspiraciones y teorías crecían como la espuma en un universo fantástico en el que todo parecía ser posible.
Ahora, las redes sociales se llenan de publicaciones y mensajes en recuerdo y honor de la actriz británica. Comprometida al máximo con la producción, sus seguidores recuerdan como Smith luchaba contra el cáncer durante el rodaje de la última película. "Varitas arriba por la mejor profesora de Hogwarts. Hasta siempre, Maggie Smith", escriben algunos usuarios de la red X en sus perfiles. Recordar algunas de sus actuaciones y escenas más icónicas es todo lo que ahora queda para mantener vivo el legado de la actriz, querida y alabada por millones de personas.