Se suele decir que en verano nos relajamos con la dieta –y con el consumo de calorías– y que nuestros deseos de adelgazar se van por la borda pues, total, ya estamos casi en cueros frente a muchísima gente en la playa. Sin embargo, no siempre es así.
El hecho de que el calor aceche y la ropa se acorte, impulsa a muchos a cuidar más de su alimentación en los meses veraniegos. Todos sabemos que los kilos de más bajo el jersey no son tan molestos como los que dejamos ver en la playa o piscina.
Por eso, para que aproveches al máximo tus vacaciones de verano, vamos a darte unos consejos de experto para que puedas quemar muchas calorías mientras descansas, te diviertes y te pones moreno (por favor, protección solar siempre y aplicarla cada dos horas como máximo). Atento:
Adelgazar en la playa es posible: las calorías que quemas andando o nadando
En verano solemos tener más manga ancha en cuanto a comidas. Está bien, no hay que constreñirse demasiado, pero cuidado con cruzar la frontera del "un día es un día", "venga, que estamos de vacaciones" o "de perdidos al río": lo empezamos diciendo un día, luego otro... y al cabo de tres semanas nos damos cuenta de que tenemos mucho menos dinero en la cuenta y que lo hemos transformado en grasa almacenada en el cuerpo. En ese momento, la marcha atrás es mucho más ardua.
Por eso, lo mejor es darte tus caprichos (cuantas más proteínas comas y menos hidratos, mejor) pero compensarlo moviéndote. A continuación, te ofrecemos una lista de actividades que te harán quemar calorías mientras gozas de lo lindo de tus vacaciones en la playa.
1) Dar paseos por la playa
Parece una tontería, pero el simple hecho de pasear por la playa quema muchísimas calorías. De hecho, andar sobre la arena quema casi el doble que hacerlo sobre una superficie plana como puede ser el cemento de la ciudad.
Así, en una hora andando se pueden quemar de 350 a 500 calorías, en función de tu peso, sexo y rapidez en la zancada.
2) Correr sobre la arena
Si un día estás muy motivado y, obviamente, no en las franjas horarias en las que hace más calor, puedes combinar andar y correr. O simplemente correr. Este ejercicio te hará quemar nada menos que 550-600 calorías mínimo cada 40 minutos. Una pasada. Pero, ojo, si no eres runner, empieza poco a poco, no te vayas a lesionar en pleno verano, lector.
3) Jugar al voley playa
Practicar voley playa consume nada menos que 544 calorías por hora, tal y como advierte el Compendium of Physical Activities (CPA). Además de perder peso, te divertirás y harás amigos o estrecharás amistades, ya que es recomendable hacer cosas en equipo (aunque no siempre).
4) Nadar (y bucear) en el mar
Es uno de los ejercicios más beneficiosos para la salud, pues todos los músculos se ven implicados en el proceso. De hecho, en el agua estos trabajan cinco veces más que en tierra. Si nadas a velocidad media durante una hora quemarás 564 calorías. Y si lo haces a mariposa, la friolera de 938/hora. Hazte con unas buenas gafas de agua y así podrás disfrutar además del fondo marino, una delicia.
5) Jugar al pádel (o a las palas)
Si eres de los que se cansa con solo mirar a dos personas jugando al pádel en la playa, no estás muy alejado de la realidad, pues este deporte quema muchas calorías. En concreto, 500 por hora. Además de entretenido –si uno tiene cierta técnica y táctica–, jugar al pádel fortalece todo el cuerpo, y sobre todo la parte superior. Eso sí, cuidado con las muñecas y los codos, ya que si no estás acostumbrado y empiezas a practicarlo durante mucho tiempo pueden resentirse.
6) Jugar con los niños
Quien tiene niños... qué le vamos a contar. De acá para allá, que si castillos, que si enterramientos, que si saltar las olas, que si peleas con pistolas de agua... Si tienes un crío cerca, aprovecha para jugar con él: no sólo quemarás calorías, sino que además os divertiréis juntos y fortaleceréis vuestra relación. Nada de delegar en los familiares el juego: levanta el culo de la arena y ponte a ello.
De comer y cenar: evita los rebozados y di sí al marisco, la carne y las verduras
Ya lo sabes, pero te lo recordamos: el ejercicio y el movimiento, por sí solos, no nos ayudarán a adelgazar si no los acompañamos de una correcta alimentación.
Como es verano, no vamos a decirte que te alimentes a base de verduras y ensaladas verdes, pero sí que elijas lo que comes con cabeza.
Las opciones culinarias en verano son numerosas y muy saludables. Tienes el gazpacho, el salmorejo, el pescadito, la carne a la brasa (si es roja, con moderación), las verduras a la brasa, ensaladas de mil formas, arroces ricos, paellas, frutas de temporada deliciosas...
[Cómo hacer ensaladas de verano 'light' y deliciosas]
Si comes de todo un poco y evitas los procesados, los dulces, los postres, los hidratos simples y moderas el consumo de alcohol, y además realizas las actividades que te hemos mencionado, volverás de tus vacaciones hecho un figurín, ya verás.