No es ningún secreto que la vida puede ser más fácil para las personas guapas y atractivas. Numerosos estudios han demostrado que ser bello tiene beneficios tanto en el terreno profesional como personal. Es el conocido como 'efecto Halo', un sesgo cognitivo que hace que nos caigan mejor y valoremos más positivamente a los individuos atractivos.
No obstante, parece que no todo es color de rosa para los 'buenorros'. Un estudio reciente, publicado en el 'Journal of Business and Psychology', descubrió que no es oro todo lo que reluce.
Los feos ganan más dinero
La investigación, realizada por Satoshi Kanazawa y Mary Still, de las universidades de Londres y Massachusetts, recogieron datos de 20.000 jóvenes estadounidenses. Todos ellos fueron entrevistados y evaluados en atractivo físico cuando tenían 16 años, y se repitió el proceso tres veces hasta que alcanzaron los 29 años.
Un estudio ha demostrado que los "muy poco atractivos" ganan más dinero que los "poco atractivos" o "atractivos"
Los hallazgos demostraron que aquellos que fueron etiquetados como "muy poco atractivos" ganaban más dinero que los simplemente eran "poco atractivos" o "atractivos".
Cuando se tuvieron en cuenta otras variables al margen del físico, los resultados mostraron que las personas que eran más tenaces, extrovertidas y menos neuróticas ganaban significativamente más que las que no tenían estas cualidades.
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Por qué los poco atractivos cobran más
¿Por qué se paga más a los poco atractivos? ¿Acaso los bellos son considerados menos inteligentes? Nada más lejos de la realidad. Seguimos creyendo, errónea o acertadamente, que las personas guapas son superiores que las feas en numerosos aspectos, pero es quizá esta apariencia lo que les ha hecho que se distraigan de sus carreras.
Los poco agraciados habrían dedicado más tiempo a crecer profesionalmente, consiguiendo así ser los mejores
Es decir, la gente guapa, y por norma general, suele tener un círculo de amistades amplio, conquistas, planes... y un largo etcétera que les habría robado tiempo durante años para dedicarlo a crecer profesionalmente. Además, las personas atractivas suelen invertir bastante tiempo en su imagen.
Los poco agraciados, por el contrario, parecen haberse privado de estas distracciones y haberse dedicado concienzudamente a su campo de conocimiento, consiguiendo así ser los mejores y, por tanto, muy bien pagados.
No obstante, son solo suposiciones. El estudio, aunque es revelador, no llega a conclusiones claras que expliquen por qué los feos ganan más que los guapos.
¿Qué opinas de todo esto? ¿Eres rico y feo o pobre y guapo? ¿O todo a la vez?