El traspaso de Claudio Bravo al Manchester City parece un hecho. Según filtró el entorno del portero chileno durante el Gamper, el acuerdo entre el jugador y la entidad inglesa es total. Bravo quiere jugar la Champions League, algo que no ha podido hacer en el Barcelona, y además veía seriamente amenaza su titularidad en el torneo de Liga debido a las presiones de Marc André ter Stegen. La idea inicial del Barça era seguir una temporada más con la pareja que tan exitosa se ha demostrado, pero las exigencias del cancerbero alemán han convencido al club de que lo más sensato es traspasar a Bravo y terminar así con la polémica bajo palos.
El Barcelona además hará un negocio redondo. En la entidad culé esperan ingresar entre 15 y 25 millones de euros, cifras que en cualquier caso superarán los 12 que en su día el Barça pagó por el meta a la Real Sociedad. Ahora, con 34 años y totalmente amortizado después de dos grandes temporadas, la marcha de Bravo podría ser uno de los pocos negocios rentables que el conjunto blaugrana ha cerrado en los últimos años. Lo que parece claro es qu eel Barcelona ya no se remitirá a la cláusula de rescisión, de 40 millones de euros, como hizo ante el primer interés del equipo de Guardiola, quien ha garantizado la titularidad y un último gran contrato al chileno.
Diego Alves, el sustituto
Hay que recordar que el fichaje de Claudio Bravo por el Manchester City se produce después de que Pep Guardiola mandase al banquillo a Joe Hart en la primera jornada de la Premier, dándole la titularidad a Willy Caballero. Habrá que ver qué sucede con el futuro de Hart ahora, ya que sería extraño ver a un jugador de su prestigio estar en la grada toda una temporada. Inicialmente, el objetivo de Guardiola fue el otro arquero del Barça, Ter Stegen, pero ante la negativa de su ex equipo el técnico catalán tendrá que conformarse con el veterano portero sudamericano.
Quien podría ser el gran beneficiado de esta operación es el portero brasileño Diego Alves, a quien el Valencia busca salida y que es el objetivo número uno del Barcelona para sustituir a Bravo. Alves cuenta también con el interés del Atlético de Madrid y el Sevilla, pero es la del Barça la oferta que más le seduce, ya que podría ser un broche de oro para su carrera deportiva, pudiéndole incluso lanzar a la titularidad de la Selección brasileña. El coste de la operación no pasaría de los diez millones de euros, aunque la negociación podría adherirse a la que ambos clubes mantienen por el delantero Paco Alcácer, así como por los canteranos culé Sergi Samper y Munir. Quien seguro saldrá del Barça es Cristian Tello, que se va cedido con opción de compra a la Fiorentina.
