Estaba cantado. Fernando Alonso ha dejado de ser intocable en Ferrari. Los sensibles italianos no admiten que el piloto español de Fórmula 1 les recuerde que los coches que le han dado desde que llegó a Maranello no están a la altura de la historia de la Scuderia, y ya ni siquiera salen a defenderle de ataques externos.
Si es que a Pirelli se le puede considerar un ente externo a Ferrari, claro. Alonso sufrió el sábado un brutal ataque verbal de Paul Hembrey, director de Pirelli, después de que el español -al igual que varios pilotos más- criticara la poca consistencia y fiabilidad de los neumáticos que montan todos los coches de la parrilla 2013.
"Tuvimos una reunión para esclarecer la disputa de Fernando con Hembery, este se disculpó y creo que tenemos que seguir adelante"
Ferrari llevaba dos días de silencio cómplice con Pirelli, uno de sus socios empresariales, y cuando por fin alguien ha hablado ha sido para templar gaitas e incluso arrimar el ascua a la fábrica de neumáticos que, como la Scuderia, está considerada una institución en Italia.
Fue, cómo no, Stefano Domenicali, director deportivo de Ferrari y uno de los máximos responsable del desastre de la Scuderiaen los Mundiales de los últimos años. Y se despachó con las siguientes declaraciones: "Tuvimos una reunión para esclarecer la disputa de Fernando con Hembery, este se disculpó y creo que tenemos que seguir adelante. Es importante que corrijamos las cosas juntos".
"Es importante escuchar las frustraciones del piloto para asegurarnos de que puede hacer un mejor trabajo, y también es importante tener el punto de vista de Pirelli porque si no eres capaz de darles la posibilidad de hacer pruebas no pueden hacer ese buen trabajo", añadió.
Y Domenicali cerró su discurso pretendidamente diplomático con una palmadita a sus paisanos italianos de Pirelli: "Puedes tirarte toda la vida en el simulador, pero no solucionarás los problemas con las gomas. De cara al futuro, con un coche totalmente nuevo (Mundial 2014), tenemos que ayudar a Pirelli para asegurarnos de hacer más tests para ellos. De lo contrario, creo que será de nuevo frustrante y vendrán otra vez los problemas".
De las ofensivas palabras de Hembrey -quien por cierto cerró este lunes de forma inesperada su cuenta de Twitter- sobre Alonso Domenicali no dijo ni mu. ¿Qué pensará Fernando de este nuevo desprecio de Ferrari?