El sol es indispensable para la vida. Es la principal fuente de vitamina D que es la responsable de que nuestro organismo pueda absorber el calcio y tengamos unos huesos fuertes y sanos. Además, el sol tiene otros resultados positivos para nuestro organismo como reducir el colesterol o disminuir la presión.
Pero no todo son beneficios: las consecuencias de una exposición prolongada y sin la protección adecuada son las quemaduras, el envejecimiento prematuro de la piel y otros problemas más graves de salud. Por eso es fundamental tomar precauciones utilizando una buena crema protectora pero también seguir protegiendo nuestra piel después tomar el sol con los denominados productos aftersun.
Según ha advertido la Academia Española de Dermatología, nos encontramos ante un verano de mayor riesgo de quemaduras solares en la piel debido a los tres meses de confinamiento vividos por motivo del coronavirus. El problema radica en que, después de tantas semanas en casa, la piel no se ha “entrenado” en primavera para recibir el sol del verano.
Por eso, este año, es aún más imprescindible incluir un aftersun junto al protector solar en nuestra maleta de vacaciones. No sólo combatiremos los efectos nocivos del sol en la piel, como la sequedad o las manchas, además evitaremos el envejecimiento prematuro y, gracias a su ayuda, podemos conseguir alargar el bronceado logrado durante más días.
Cuando hablamos de aftersun pensamos de manera inmediata en cremas. Desde Vozpópuli te vamos a mostrar que este tipo de producto se presenta en muchos otros tipos de formato y te recomendaremos cuál de ellos puede ser el más aconsejable para ti.
¿Cuáles son los beneficios de usar un aftersun?
Dentro de lo que llamamos aftersun nos encontramos con todos esos tipos de productos que se aplican sobre la piel después de una exposición prolongada al sol. Su función principal es la de recuperar la hidratación y elasticidad habitual, eliminar la sensación de ardor provocada por la radiación solar y evitar el envejecimiento prematuro. Además, los productos más adelantados están preparados para desarrollar un bronceado más uniforme y duradero.
Después de tomar el sol nuestra piel sufre una deshidratación a la que el aftersun pone remedio. Además, por muy prudente que seamos, la radiación solar siempre produce una inflamación de la piel para la que también resultan eficaces.
Pero cuando tomamos el sol no sólo exponemos a nuestra piel a sus rayos, también se ve expuesta a otro tipo de agentes dañinos como la arena, la sal del mar o el cloro de las piscinas. Es muy importante crear una barrera protectora ante todos ellos sabiendo elegir un buen producto aftersun que haga que la piel recupere su estado habitual de una manera rápida y eficaz.
Tipos de aftersun
No existe un único tipo de aftersun. Atendiendo a su composición se pueden distinguir hasta tres grupos:
- Descongestivos. Son los que tienen una función antiinflamatoria y que logran que tengamos una sensación de frescor después de su aplicación. Entre sus ingredientes suelen encontrarse el aloe vera, la caléndula y otros componentes mentolados. Suelen ser productos que proporcionan un efecto frío por lo que resultan muy agradables después de haber estado pasando calor bajo los rayos solares.
- Regeneradores. Son los mejores si hemos sufrido quemaduras ya que consiguen reparar la piel. Su composición suele ser rica en vitaminas A y C y son los mejores para evitar el envejecimiento prematuro ya que su principal función es la de regenerar las células.
- Antioxidantes. Contienen un alto porcentaje de vitamina E y tienen una función hidratante, antiinflamatoria y cicatrizante.
Estos tres ámbitos no son excluyentes entre sí, la mayoría de los productos cuentan con las tres propiedades y se catalogan en uno u otro grupo dependiendo de cuál de ellas sea la predominante.
¿Cómo elegir el mejor para tu piel?
Sabiendo que en el mercado nos vamos a encontrar con diferentes tipos de aftersun ¿Cuál de ellos debemos elegir? A la hora de la compra tenemos que tener en cuenta varios factores, el que elijamos no debe contener alcohol ni aceites artificiales que suelen derivarse del petróleo y que pueden causar irritaciones. Siempre será mucho mejor optar por productos compuestos por productos naturales.
Si uno de nuestros objetivos es prolongar el bronceado durante más tiempo, tenemos que fijarnos en que contengan componentes derivados de la melanina como es la promelanina. Con este tipo de ingredientes podremos alargar el moreno hasta un mes más.
Si tu piel es seca apuesta por un producto cremoso. Si es grasa, por uno de tipo gel
Además de su composición, también tenemos que prestar atención a su textura. Si tu piel es seca y delicada apuesta por un producto cremoso, necesitará de más tiempo para nutrirse e hidratarse y esta es la textura que la dermis puede ir absorbiendo poco a poco. Sin embargo, si tu piel es más grasa, lo mejor es elegir uno de tipo gel cuya absorción sea más rápida y así prevenir la aparición de brillos.
Si tu piel sufre de algún problema específico como acné, extrasensibilidad o cualquier patología dérmica, lo mejor es buscar productos específicos para tratarlo. Lograremos un resultado doble, por un lado los beneficios del aftersun y, por el otro, mantener el tratamiento habitual para nuestra alteración cutánea.
Por último, pero no menos importante, hay que fijarse en la comodidad. Es importante elegir el método de aplicación que nos sea más sencillo. Los más habituales son la crema, la loción o el spray.
Un aceite vegetal como aftersun
El último descubrimiento cosmético para combatir los efectos nocivos del sol son los aceites vegetales. Aplicados tras los baños de sol, tienen propiedades calmantes, hidratantes y algunos de ellos son ideales para reducir la inflamación y las molestias. Te recomendamos probar los aceites faciales de Armonía Cosmética que están compuestos sólo de productos vegetales y cada uno de ellos cuentan con su propia función.
A las dos semanas de dejar de exponernos al sol nuestra piel pierde luminosidad y pueden aparecer manchas y pequeñas arrugas. Para combatirlo usaremos unas gotas del aceite facial iluminador, un aceite de tacto seco con un cóctel de principios activos donde las estrellas son la vitamina C, que combate los radicales libres y ayuda a unificar el tono gracias a su poder despigmentante, y la vitamina E, que tiene un poder antioxidante que devuelve la firmeza y elasticidad.
No sólo está el sol, en verano nuestra piel también se enfrenta a las altas temperaturas que contribuyen a su deshidratación. Para luchar contra este efecto podemos usar el aceite facial nutritivo que es un antiaging 100% natural y cuenta con el ingrediente cosmético de moda, la astaxantina, capaz de mantener los niveles óptimos de colágeno de la piel. Además tiene aceite de aguacate y argán para ponerle freno tanto a la deshidratación como a la aparición de arrugas.
La piel se irrita por el sol y pueden terminar apareciendo rojeces y picores. En este caso el aceite facial calmante es el más eficaz porque tiene un efecto descongestivo. En esta tercera opción el ingrediente más importante es el aceite de chía que es un antiinflamatorio natural rico en omega 3. Nos ayuda a aumentar la producción de colágeno lo que se traduce en un piel más suave, joven y libre de arrugas. También es perfecto para pieles secas o sensibles gracias a su alto contenido en minerales y vitaminas A y E que favorecen la hidratación y son antioxidantes.
Una mascarilla como aftersun
Otra manera diferente de realizar un tratamiento aftersun es recurrir a una mascarilla. La piel del rostro es una de las más delicadas y que más acusan los efectos del sol y aplicarse una mascarilla facial de forma habitual puede evitar la deshidratación propia del verano.
La mascarilla tisú reparadora de aloe vera que nos propone la marca Iroha Nature es un planazo para las noches de verano. Después de un largo y agotador día de playa o piscina es hora de cuidarnos y ayudar a reparar la piel e hidratar nuestro rostro. Para ello no hay nada mejor que el aloe vera que es el aftersun natural perfecto que se lleva usando generaciones.
Los productos de esta casa son aptos para veganos porque cuentan sólo con ingredientes naturales. Los resultados de su mascarilla especial de aloe vera será una piel del rostro más luminosa y una ayuda extra para prevenir la aparición de arrugas.
Una leche calmante como aftersun
La marca Atlantia nos propone una leche calmante con una suave y refrescante fórmula. Este producto nutre, protege y regenera la piel gracias a la combinación de sus ingredientes activos donde podemos encontrar aloe vera canario que es cultivado de manera ecológica en Canarias.
El Aloe vera tiene propiedades calmantes y cicatrizantes por lo que este aftersun ayuda a aliviar el ardor y enrojecimiento de la piel producidos por el sol consiguiendo un gran efecto calmante e hidratante además de una agradable sensación ya que resulta una loción altamente refrescante.
Un spray como aftersun
Una manera bien sencilla de aplicarse un aftersun es recurriendo a un producto en spray como el que nos ofrece la prestigiosa marca Isdim que tiene una difusión continua, homogénea y se puede aplicar en cualquier posición. Basta con agitar y pulverizar sobre la piel después de la exposición solar efectuando un suave masaje con la yema de los dedos.
Tiene un sinfín de propiedades beneficiosas entre las que destaca su efecto calmante y refrescante sobre la piel irritada tras la exposición solar gracias a su contenido en mentol y camomila. Además hidrata la piel y ayuda a repararla intensamente gracias a los efectos de su composición que contiene aloe vera, Pantenol, Vitamina E, Centella Asiática & Bisabolol.
También cuenta con propiedades estéticas ya que los nuevos Post-Solar Isdin evitan la descamación de la piel y prolongan el bronceado logrado durante más semanas.
Vitamina E como aftersun
La vitamina E es el ingrediente aftersun que debe estar presente en tu crema si quieres cuidar la piel después de un día de playa o piscina. Una buena opción es recurrir a las cremas regenerantes de la firma Bioxán que poseen esta vitamina en un 99% de concentración por lo que resultan perfectas para pieles sensibles, reactivas, dañadas o muy deshidratadas.
Tenemos dos opciones, una de las cremas es para el cuidado facial mientras que la otra es para usar en el resto del cuerpo. Ambas cremas combaten la sequedad e irritación y restauran, nutren y regeneran en profundidad. Además, reducen la apariencia de manchas y mejoran la firmeza cutánea gracias a su efecto antiaging producido por el secreto de su fórmula: una gran concentración de activos naturales 100% biológicos.
Son aptas para hombres y mujeres, para todo tipo de pieles y edades (incluidos niños y bebés) y especialmente para aquellas personas que presenten un estado de piel dañada por los efectos adversos de diversos tratamientos médicos, tanto estéticos, como oncológicos o dermatológicos.
Un serum como aftersun
Bioxán también nos ofrece otra alternativa aftersun para calmar, regenerar y tratar el fotoenvejecimiento de la piel. Se trata de su nuevo Sérum Extra Neo que contiene ingredientes vegetales de origen natural como vitamina E procedente de algas marinas, ácido hialurónico extraído del trigo y la remolacha y prebióticos.
Es un nuevo concentrado facial para todo tipo de pieles, incluidas las más sensibles y delicadas, que con su uso quedarán suaves y protegidas de las agresiones externas. Este sérum posee una textura ligera y de fácil absorción y viene en un envase 'air-less' que lo mantiene aislado del contacto con el aire, lo que permite que conserve todas sus propiedades intactas hasta el último día.
Se han realizado diferentes estudios de eficacia para corroborar su efectividad asegurando una piel luminosa, hidratada y llena de vitalidad porque logra difuminar las arrugas y otras líneas de expresión ya que trabaja profundamente en diversas capas de la piel.
Ahora ya conoces lo importante que es utilizar un aftersun después de tomar el sol y las múltiples variables que encontrarás en el mercado. ¿Cambiarás este verano tu producto habitual?