La crisis del coronavirus ha dejado primer trimestre para olvidar en cuanto a operaciones corporativas se refiere. Hasta marzo, se cerraron en España un total de 484 fusiones y adquisiciones por valor de 8.387 millones de euros, según los datos de Transactional Track Record (TTR), lo que supone una caída del 16,70% en el número de operaciones y del 57,14% en el importe de las mismas con respecto al primer trimestre del año pasado.
Los datos de los primeros tres meses también arrojan un descenso significativo de las inversiones de fondos de capital privado internacionales en empresas españolas, que registran una caída del 34,48%, con tan solo 19 operaciones cerradas. “Hubo operaciones que estaban en marcha y se cerraron justo antes del estallido del coronavirus. Otras que estaban más incipientes se han retrasado, pero no se han cancelado", explica a este diario José Antonio Sánchez-Dafos, socio de corporate de Latham & Watkins. "Prevemos que los términos de las mismas se replantearán durante esta pausa en el mercado”.
Sánchez-Dafos, especialista en private equity, señala que ahora mismo las casas de capital privado se están centrando en la gestión de sus porfolios, no en las inversiones, aunque también apunta que está crisis está aflorando "nuevas operaciones" de menor tamaño. A la espera de que el mercado vuelva a reactivarse con normalidad, lo que ya empieza a proliferar son las refinanciaciones y las reestructuraciones.
La crisis sanitaria ha llevado al Gobierno a tomar medidas proteccionistas en materia de inversiones y blindar a las compañías españolas de inversores extranjeros que puedan aprovecharse de la debilidad del mercado. A este respecto, el abogado entiende este tipo de restricciones a corto plazo, pero alerta del peligro de mantenerlas demasiado tiempo y recuerda que "la inversión extranjera ha sido un motor de crecimiento para el mercado español en los últimos años”.
Incertidumbre local e internacional
Marcela Chacón Sierra, analista de RBI de TTR, añade que esta caída de la inversión se debe "al alto entorno de incertidumbre local e internacional de las últimas semanas" que ha provocado "un claro descenso de la dinámica ordinaria de inversión crossborder en España".
Al igual que Sánchez-Dafos, la analista cree que una vez se despeje el panorama, el mercado estará abierto a nuevas operaciones. En su opinión, serán aquellos compradores que cuenten con músculo financiero suficiente los que podrían aprovechar las "bajas valoraciones" para hacer cierres en sectores clave como el tecnológico o digital. "Es de resaltar que estos dos sectores conservan un alto dinamismo en el segmento de inversión de fondos extranjeros de private equity y venture capital, principalmente como empresas que adquieren objetivos en España, lo que da un parte de confianza en medio de la volatilidad actual del mercado".
Por último, señala que otros beneficiados de esta coyuntura serán las principales firmas de capital privado. "Han acumulado fondos de deuda en los últimos periodos y que podrían recuperar activos a un precio menor".