"Tenemos varios picos al año en los que los casados o comprometidos recurren a nosotros para tener una infidelidad: para empezar la primera semana de enero, una vez que han pasado las Navidades. En segundo lugar, justo después de San Valentín, tal vez por los decepcionados con su celebración. Por último, el tercer pico importante es septiembre, a la vuelta de las vacaciones y tras haber pasado un tiempo con la pareja que a lo mejor no ha sido tan satisfactorio como se esperaba. El único mes del año que no es bueno para nosotros es diciembre, un mes muy familiar por las Navidades". Quien así habla es Christoph Kraemer, el director de Ashley Madison en Europa. Esta empresa especializada en infidelidades que lleva en España desde 2011 y desde entonces ha generado polémica en varias ocasiones, como cuando utilizó una imagen del Rey en un cartel gigante en plena Gran Vía de Madrid -junto a Bill Clinton y el príncipe Carlos de Inglaterra- bajo la pregunta ¿qué tienen estas "realezas" en común?
Ashley Madison lidera el negocio en un subsector de las páginas de contactos por internet: el destinado únicamente a encuentros sexuales furtivos y especialmente infidelidades. Pero la red ofrece mucho más: desde páginas donde el objetivo es encontrar pareja más o menos estable y seria (Meetic, e-Darling) hasta otras donde se busca exhibirse y lo que surja (Badoo) pasando directamente por las aplicaciones vía smartphone que tienen gran éxito entre la población gay, como es el caso de Grindr. Con sus diferencias, todas ellas coinciden en algo: buscan facilitar las relaciones íntimas gracias a las nuevas tecnologías.
Meetic: beneficios astronómicos
Pero, ¿qué empresas tenemos detrás de estas webs? La más transparente de todas ellas es Meetic.com, que ha ganado 41,6 millones de euros en el primer trimestre del año, aumentando en 54.202 (un 7%) sus suscriptores de pago hasta un total de 811.534, según la memoria económica que ha facilitado la propia empresa. En 2012 los beneficios totales de la compañía fueron de 164,8 millones de euros mientras que en 2011 habían ganado 178,3 millones. La compañía da trabajo a unas 400 personas en Europa.
Su directora de Comunicación, Lara san Gil, dice que la historia de la empresa es "la de una startup. Nació en Francia cuando el fundador, Marc Simoncini, se dio cuenta durante una cena entre amigos en 2002 de que muchos estaban separados, divorciados, con ganas de encontrar pareja pero sin las mismas oportunidades que cuando eran jóvenes: tenían hijos, un trabajo que les requería mucho tiempo. Por ello se le ocurrió la idea de utilizar internet para poner en contacto a estas personas que pueden ser compatibles y están buscando pareja. Si estas personas dejasen esto al azar nunca llegarían a conocerse". En esta década, Meetic se ha extendido por Europa hasta ser adquirida por la norteamericana Match.com en 2009.
Siendo la empresa líder a nivel de tráfico, Meetic ha visto cómo le surgen competidoras en los últimos tiempos en España. La más conocida es e-Darling, quien ha lanzado en los últimos meses una agresiva campaña de publicidad a través de televisión. Esta empresa es de origen alemán, fue fundada en 2008 y, según su propia web, tiene 240 trabajadores y la sede en Berlín. Asegura utilizar una fórmula matemática con la que mide la compatibilidad entre personas que puedan interesarse mutuamente.
Los modelos 'freemium'
Hasta ahora, todas las empresas que hemos tratado tienen un modelo de negocio estrictamente de pago: no es posible hacer uso de las mismas sin pasar por taquilla, o apenas dejan ver una pequeña parte. Pero también existen empresas con modelo de negocio que alterna el pago con los servicios gratuitos. Tal es el caso de Badoo, compañía cuyo fundador vivía en Valencia y que tuvo la sede social en la ciudad del Turia durante un tiempo pero que actualmente está radicada en Londres y tiene presencia en 150 países, aunque sólo da trabajo a 150 empleados.
La compañía no publica sus datos económicos, con lo cual es imposible saber si está ganando dinero en estos momentos o no, aunque desde luego el tráfico que genera es creciente. Sus creadores no apostaban mucho por el mercado español, especialmente por el carácter conservador de sus mujeres, pero la red ha tenido un éxito notable entre un target determinado.