Mercadona ha revolucionado en los últimos tres años su gestión de la cadena de frescos gracias a un innovador sistema tecnológico para controlar al minuto los productos frescos que se piden (implementado inicialmente con el pescado) y analizar las tendencias de consumo de los clientes. Los valencianos han revolucionado así su cadena de distribución en los productos donde más importante es la eficiencia tecnológica: cada minuto cuenta en la cadena de distribución de unos alimentos que se estropean en apenas unos días.
Con el nuevo sistema tecnológico, los precios pueden decidirse desde los headquarters, rebajándolos si es necesario para vender el producto
"Antes teníamos que esperar 24 horas para saber lo que teníamos en reserva y hacer pedidos. Ahora tenemos una gestión en tiempo real, lo cual redunda en que el pescado esté más fresco. El objetivo era transportar pescado directamente desde las lonjas a las tiendas de costa o que al día siguiente por la mañana estuvieran en una tienda de Madrid, por ejemplo", ha asegurado Francisco García Cortés, director de compras informática de Mercadona. Oracle ha sido el 'partner' principal en esta revolución tecnológica, suministrando a Mercadona una tecnología que "básicamente lo que hace es que cuando alguien compra en una tienda de Mercadona, se envía la información del ticket a los headquarters de la compañía, donde se procesa la gestión y se hacen los pedidos". Este sistema, aseguran, también influye en los propios precios, que se pueden decir "desde la central de forma online e inmediatamente implantarlo en las tiendas". Por ejemplo, que la tienda pueda gestionar en tiempo real el precio del producto, rebajándolo con los criterios que ha definido Mercadona, si cree que es necesario para ayudar a vender el producto.
De igual modo, también se detectan patrones de comportamiento en los clientes, que varían según factores como la climatología, la influencia de la televisión, etc.
¿Un futuro digital?
El presidente de la compañía valenciana, Juan Roig, ha mostrado en múltiples declaraciones públicas su poco interés por el canal digital, que todavía es muy minoritario en España al contrario de lo que ocurre en otros países.
"La informática en silos que teníamos hasta ahora no podía dar servicio a la cadena tal y como la queríamos. Necesitábamos una gestión en tiempo real y no tener que esperar 24 horas para hacer pedidos. Ahora los trabajadores están dotados de dispositivos de movilidad, como por ejemplo el comprador que incluye el pescado en la lonja". El proyecto, asegura García Cortés, "ya es un éxito pero está en fase inicial. Para que funcionara ha habido que crear dos CPD -centros de procesos de datos- donde manejamos tecnología de distintos proveedores españoles. Nuestro próximo objetivo es aplicar todo lo que hacemos en productos frescos en tiempo real a los productos secos. Tenemos que interactura con nuestros 'jefes' por el canal que ellos quieran, tanto físico como digital como aquello que es sólo digital".
Por su parte, el director general de Oracle España, Leopoldo Boado, se muestra orgulloso de que su tecnología haya permitido a los supermercados valencianos "cambiar los procesos batch, donde hay que esperar 12 o 24 horas para tomar decisiones, a los procesos en tiempo real".
