Los últimos movimientos en Cimic, filial australiana de ACS, van más allá de un simple relevo en la dirección financiera de la compañía. El grupo de construcción y servicios trabaja en un proyecto para integrar en el medio plazo a Cimic con la que es su principal accionista, la alemana Hochtief, controlada al 60% por la española.
Durante los últimos meses, el objetivo de ACS ha sido dotar a las dos empresas de la estrategia y los sistemas de trabajo que sigue el grupo presidido por Florentino Pérez. En la última junta de accionistas, celebrada a finales de abril, el propio Pérez señaló que la meta, encomendada al futuro consejero delegado de ACS, Marcelino Fernández Verdes, estaba próxima a alcanzarse y que tanto Hochtief como Cimic trabajarían bajo el sistema y la estrategia del grupo.
Los problemas financieros de Cimic no terminan de resolverse, especialmente los relacionados con su endeudamiento
Sin embargo, esta integración podría dar un paso más allá. Los problemas financieros de Cimic no terminan de resolverse, especialmente los relacionados con su endeudamiento, pese al agresivo plan de venta de activos que diseñó y puso en práctica Fernández Verdes. Tras no alcanzar los objetivos previstos, hace unos días el ejecutivo decidió prescindir de Javier Loizaga como director financiero de Cimic, tras poco más de un año en el cargo. Un nombramiento en el que tuvo mucho que ver Florentino Pérez.
Para resolver los problemas financieros de Cimic, que incluso han llegado a lastrar a la compañía como contratista en Australia, su propio territorio, ACS está sopesando la posibilidad de fusionarla con Hochtief, notablemente más saneada. Una operación que vendría a acelerar la compra de acciones de su filial que realiza todos los años la compañía alemana, que ya controla aproximadamente el 70% del capital de Cimic.
Un relevo intencionado
La persona elegida por Fernández Verdes para sustituir a Javier Loizaga ha sido Ángel Muriel, hasta ahora responsable de fusiones y adquisiciones de Hochtief, al parecer, un nombramiento nada casual. La próxima fusión a analizar por parte de Muriel bien podría ser la de la compañía en la que acaba de aterrizar con su antigua empresa.
La integración entre ambas empresas supondría una simplificación de estructuras y un importante ahorro de costes, aunque también repercutiría en el empleo, algo que también sucedió cuando ACS tomó el control de Hochtief y, por ende, de Cimic (anteriormente denominada Leighton).
La integración de las empresas simplificaría las estructuras y ahorraría costes
Actualmente, Hochtief y Cimic han unificado en gran medida sus sistemas de trabajo para adaptarse a los que emplea ACS. La labor ha sido desarrollada por Fernández Verdes que, además, acapara el máximo poder ejecutivo en ambas empresas. En principio, su llegada a ACS para ocupar el nuevo cargo de consejero delegado está prevista para la primavera de 2016. Para entonces, la fusión de Cimic y Hochtief podría estar mucho más cerca.
A finales de la pasada semana, Cimic presentó sus resultados semestrales ante los analistas locales. En algunos de los informes que recogieron los comentarios realizados por la empresa se mencionaba la posibilidad de la integración con Hochtief. En este sentido iba la mayoría de las interpretaciones que los analistas hacían sobre el relevo de Loizaga y la llegada de Muriel.
