El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha decidido nombrar un número dos en la petrolera. No es un consejero delegado, como venía pidiendo Pemex desde que, el verano pasado, el grupo estatal mexicano, accionista histórico de la española, suscribió su frustrada alianza con Sacyr; pero se le parece bastante. El consejo de administración de Repsol ha aprobado hoy por unanimidad, y a propuesta de Brufau, su nuevo plan estratégico y ha nombrado al hasta ahora director de Exploración y Producción (Upstream), Nemesio Fernández-Cuesta, nuevo director general de negocios.
Fernández-Cuesta, un ejecutivo muy bien conectado con el PP (fue secretario de Energía con José María Aznar), tendrá el mismo rango en la estructura jerárquica que otros dos altos directivos, pero será el que más áreas aglutine. Será responsable de su anterior negocio (el Upstream), el motor de la compañía en los últimos ejercicios, así como de la anterior dirección general de Downstream (Refino), que se segrega en dos grandes actividades: una Industrial (Refino y Química) y de Nuevas Energías, y otra Comercial (Marketing y GLP).
También dependerán de Fernández-Cuesta las actividades de Trading y Transportes, además del negocio del GNL y el área de Recursos (Ingeniería y Compras y Contrataciones).
Su nuevo cargo no llega al nivel de consejero delegado que había reclamado la petrolera estatal mexicana, dado que Fernández-Cuesta seguirá sin estar presente en el consejo de administración de Repsol. Pero puede servir para colmar la aspiración de Pemex de lograr más poder en la española, de la que tiene un 9,4%, y con la que firmó en enero (tras romper su pacto con Sacyr) una alianza estratégica a la que ambas partes están empezando a dar forma ahora.
El hasta ahora responsable de Downstream, Pedro Fernández Frial, pasará a pilotar la Dirección General de Estrategia y Control, “con el objetivo de potenciar el desarrollo activo de la Estrategia de la Compañía, basada en la anticipación de oportunidades, el control de la gestión y el impulso de la tecnología como motor de transformación”, indicó la empresa en una nota. A su cargo estará las áreas de Estrategia, Tecnología, Seguridad y Medio Ambiente, Estudios y Análisis del Entorno, Control de Gestión, Auditoría y Control de Reservas del Grupo.
Al nivel de Fernández-Cuesta y Fernández Frial, permanece Miguel Martínez, como director general Económico Financiero y de Desarrollo.
Como sustituto de Fernández Cuesta en el área de Upstream, Repsol ha nombrado a Luis Cabra, hasta ahora número dos en esa área, que además se incorpora al comité de dirección. La comisión de nombramientos de la petrolera también ha promovido el ascenso del expresidente del PNV Josu Jon Imaz, responsable de la filial vasca, Petronor, y del negocio de energías renovables, al comité de dirección, en el que también están Brufau, su hombre de confianza (Luis Suárez de Lezo, consejero secretario general y del consejo), Fernández-Cuesta, Fernández Frial, Martínez, Cristina Sanz Mendiola (directora general de Personas y Organización) y la directora general de Comunicación y Presidencia, Begoña Elices.
Junto con la nueva estructura organizativa, el consejo de Repsol ha aprobado el nuevo plan estratégico, que se presenta mañana y que los analistas esperan con expectación, porque deberá aclarar los planes de la compañía tras la expropiación, el mes pasado, de YPF por parte del Gobierno argentino. La petrolera celebra su Junta de Accionistas el próximo jueves.
