El consejero delegado de Impregilo, Pietro Salini, sorprendió a todos con la emisión de un comunicado firmado personalmente por él en el que proponía alternativas para solventar el problema de liquidez que padecen las obras de ampliación del Canal de Panamá, entre las que se incluye un anticipo de 1.000 millones de dólares a cargo de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) La compañía italiana forma parte del consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC), que lidera Sacyr y que este martes realizó una propuesta oficial a la autoridad canalera.
La nota, en la que Salini habla a título propio, ni de parte de GUPC ni siquiera de Impregilo, señala que una de las propuestas alternativas consiste en que la ACP anticipe 1.000 millones de dólares, como parte de los 1.600 millones de dólares que el consorcio reclama en concepto de sobrecostes de la obra.
La segunda alternativa que plantea Salini sí se corresponde con la propuesta que GUPC trasladó este martes a la ACP, es decir, una inyección de 100 millones de dólares por parte del consorcio a cambio de un anticipo de la ACP de 400 millones de dólares.
El comunicado de Salini llega en un momento delicado, en plenas negociaciones entre el consorcio y la administración del Canal, que tuvo la mediación de la ministra de Fomento, Ana Pastor, que ha pasado los últimos días en el país centroamericano.
Sacyr declinó hacer comentarios sobre el comunicado personal de Salini.
Rechazo de la ACP
La salida a escena del consejero delegado de Impregilo llega cuando se extienden por Panamá rumores de fuertes disensiones en el seno de GUPC. La abrupta irrupción del ejecutivo italiano también acrecienta las sospechas de que fue Salini el principal ideólogo de enviar a la ACP el preaviso de paralización de las obras de ampliación del Canal de Panamá, hecho que tuvo lugar en la tarde (hora local) del pasado 30 de diciembre.
En este caso, el ejecutivo italiano no pudo actuar por su cuenta, dado que las decisiones trascendentales para el consorcio se toman por unanimidad de los socios (además de Impregilo y Sacyr, la belga Jan de Nul y la panameña Cusa).
El administrador principal del Canal de Panamá, Jorge Quijano, ha rechazado la propuesta al indicar que la ACP y el consorcio GUPC determinaron realizar las reclamaciones según lo previsto en el contrato mientras que las reclamaciones por sobrecostes a las que se refiere Salini son anteriores y aún no han sido resueltas.
Próximas reuniones
No obstante, la ACP y GUPC volverán a verse las caras en las próximas horas en una nueva reunión para intentar acercar posturas. Aunque, muy probablemente, la nota de Salini no contribuya precisamente a crear el ambiente idóneo para llevar a cabo las negociaciones.
Fuentes del sector hablan de Pietro Salini como un ejecutivo tremendamente impulsivo y al que es difícil contener cuando quiere expresarse. En la nota acusa también a la ACP de inexperiencia en obras de magnitud tan grande como la ampliación del Canal de Panamá, una idea que lleva largo tiempo instalada en el consorcio pero que sus principales responsables se han cuidado mucho de airear. Antes de que llegara Salini, claro está.