La banca española y sus clientes afectados por hipotecas supuestamente irregulares se juegan en las próximas semanas miles de millones. El terreno de juego es el Tribunal Supremo, donde se decidirá sobre dos cuestiones clave: el polémico índice IRPH, sobre la que los magistrados debatirán este miércoles; y, más importante, los gastos hipotecarios, que ya está sobre la mesa del Supremo a la espera de fecha.
La banca juega fuera este partido, ya que el sector ha ido perdiendo una a una todas las grandes batallas judiciales. Sobre todo las vinculadas a la comercialización de hipotecas, como la reciente de las multidivisa. El mayor golpe hasta ahora ha sido por las cláusulas suelo, que exigió provisiones por 3.000-4.000 millones de euros, unido a lo que han dejado de cobrar por no aplicarlas.
Sin embargo, los gastos hipotecarios pueden suponer un impacto todavía mayor. La previsión más optimistas que maneja la banca es de 3.000 millones de euros, en un escenario en el que el Supremo diga que es el cliente quien tiene que hacer frente al Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD).
Desde que se abrió este frente judicial, los tribunales no se ponen de acuerdo sobre quién debe hacerse cargo del ITP y AJD, aunque el 90% de los casos sí que fuerzan al banco a devolver al menos la mitad del resto de gastos (notario, registro y gestoría).
Calendario
Fuentes financieras consultadas por este medio esperan que haya fallo sobre los gastos hipotecarios entre finales de este año y comienzos del próximo. Esta decisión implicaría una oleada de demandas contra la banca sin precedentes, en un momento en el que los juzgados ya están saturados por las cláusulas suelo.
Antes llegará la sentencia por el IRPH. Conocido como el euribor español, se implantó principalmente entre las cajas. Este índice se ha situado siempre muy por encima del euribor, lo que ha provocado las reclamaciones. Así, concluyó noviembre a un nivel del 1,9%, frente a la tasa negativa de 0,192% del euribor.
El sector financiero se queja de que todos los fallos judiciales caigan en su contra sin distinguir si el cliente sabía o no lo que contrataba
No hay estimaciones de cuánto costaría a la banca quitar el IRPH de forma retroactiva. Pero teniendo en cuenta que hay en torno a un millón de hipotecas sujeto a este índice y todo el tiempo que el IRPH ha estado por encima del euribor, el impacto sería también de miles de millones.
Este frente judicial llega en un momento en el que la banca está intentando remontar el vuelo tras años de crisis. Estas sentencias frenan el beneficio y la recuperación de la rentabilidad. Los bancos se quejan de que estos fallos se apliquen sin distinguir si el cliente conocía o no lo que contrataba, y sus motivaciones para hacerlo. Así, por ejemplo, argumentan que las multidivisas se contrataban porque su tipo de interés era, a priori, inferior.