La relación comercial entre España y Argelia sigue estancada. El país magrebí bloqueó los intercambios con España el pasado 9 de junio por el cambio de postura de Pedro Sánchez sobre el Sáhara Occidental en favor de Marruecos. Moncloa y Argel no han logrado en este tiempo resolver su crisis diplomática. El boicot a las exportaciones españolas ya está quedando reflejado en las estadísticas de la Secretaría de Estado de Comercio: entre junio y julio, España perdió más de 4.400.000 euros al día en ventas al país norteafricano.
El lunes, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró que se había recuperado "cierta normalidad" en las relaciones comerciales entre los dos países, aunque señaló que todavía perduraba un "bloqueo" en "ciertas operaciones". Sus declaraciones chocan con la información que maneja el Círculo de Comercio e Industria Argelino-Español (CCIAE). "No se ha recuperado nada. El ministro no se a qué quería hacer referencia. Aparte del gas, no hay intercambios", explica a Vozpópuli el presidente de esta organización, Djamal-Eddine Bou Abdallah.
116 días de crisis diplomática entre España y Argelia
La buena relación entre los dos países se fue al traste después de que Moncloa apoyase en marzo la propuesta marroquí de autonomía sobre la antigua colonia española. En el Gobierno argelino, presidido por Abdelmadjid Tebboune, sentó como un jarro de agua fría: Marruecos es su principal rival en el Magreb y, hasta la fecha, España jamás se había posicionado junto a Rabat en la cuestión del Sáhara.
La primera reacción de Argel fue anunciar una revisión de los precios energéticos pactados con España y poner trabas a la industria cárnica española. Pero fue el 8 de junio cuando anunció la suspensión de los intercambios comerciales con España. Argel escenificó el boicot suspendiendo el Tratado de Amistad Buena Vecindad y Cooperación con España. A su vez, la Asociación Profesional de Bancos y Entidades Financieras (ABEF), patronal de los bancos argelinos, ordenó congelar las domiciliaciones de los intercambios comerciales con nuestro país. La ruptura, sin embargo, no ha afectado en ningún momento a las compras de gas argelino. Hasta el año pasado, el país magrebí era el principal suministrador de España de esta materia prima.
En la práctica, el veto consiste en una serie de trabas burocráticas que imposibilitan completar una transacción con Argelia. Desde el primer momento, Bruselas se puso del lado de Moncloa, pero la advertencia comunitaria no hizo que Tebboune se echara para atrás. Desde entonces, han pasado 116 días y la solución del conflicto sigue sin un horizonte claro.
Hace unos días, la Secretaría de Estado de Comercio actualizó en su portal DataComex las cifras sobre las exportaciones a Argelia en julio, mes en el que el veto estuvo siempre vigente. En total, en esos 31 días, España perdió 127.046.134 euros de sus beneficios en exportaciones respecto al mismo mes de 2021. Si sumamos este dato al de junio -donde los intercambios permanecieron bloqueados durante 22 días-, la cifra se eleva a los 234.693.703 euros que se dejaron de ganar. Es decir, 4.428.183 euros al día en comparación a las mismas fechas del año pasado.
Hay que tener en cuenta que en 2021 los intercambios comerciales con Argelia fueron menos fluidos debido a los efectos de la pandemia, las políticas proteccionistas de su Ejecutivo y la crisis con los precios del petróleo, explica el Círculo de Comercio e Industria Argelino-Español.
Antes de la pandemia, las exportaciones españolas en junio y julio cosechaban mejores números. De hecho, en los últimos tiempos, España siempre ha considerado a Argelia como un mercado prioritario por la relación energética. Las exportaciones a Argelia, en cambio, apenas han representado en los últimos años un 1% del total de ventas españolas al exterior.
S.Johnson
Marruecos es importante Argelia no. Y las tormentas pasan pero lo importante permanece.