El mercado presenta actualmente un escenario en el que resulta complicado obtener rentabilidades atractivas, de ahí que las gestoras se vean obligadas a afinar su estrategia con vistas a lograr batir el rendimiento de los principales indicadores. En el caso de Ibercaja Gestión, la clave es diseñar productos flexibles, capaces de adaptarse a todo tipo de entornos de mercado.
Javier Rillo, director de análisis de la entidad, explica que el actual escenario de tipos cero en la zona euro, que se mantiene desde hace un tiempo, hace muy complicado sacar partido de la inversión en renta fija mientras que las bolsas, una vez superada la crisis, no están precisamente baratas.
"El Ibex-35 cotiza ahora un 30% por debajo de sus máximos históricos. Pero el Ibex con dividendos se encuentra un 15% por encima de esa cota. En el caso de EEUU, el índice S&P 500 está en 60% por encima de los máximos registrados antes del inicio de la crisis", describe Rillo.
La estrategia de Ibercaja Gestión pasa por un producto que permita al gestor "adaptarse a cualquier producto de mercado, para poder ofrecer al cliente lo que quiere: apostar por empresas con potencial de retorno de doble dígito".
La estrategia 'value'
"Las buenas empresas presentan retornos que se encuentran entre el 7% y el 8%. Es el producto de sumar su crecimiento, que suele estar en línea con el del PIB mundial, y la retribución que ofrecen habitualmente a sus accionistas". Con este tipo de empresas "sólo se pueden conseguir rendimientos de doble dígito en una época de recesión".
Una tercera vía es adquirir participaciones en determinadas compañías a precios absolutamente extraordinarios, con lo que se podrían obtener retornos en el entorno del 25%. Es lo que la entidad enmarca en una estrategia de que denomina ‘value’.
Para que la política funcione "es fundamental pedirle al cliente paciencia y libertad para trabajar, sin que el tamaño del patrimonio bajo gestión nos condicione".
La entidad valora especialmente la transparencia que ofrece en sus decisiones para que el cliente sepa, en cualquier momento, de dónde proceden los rendimientos. "Y también la alineación de intereses, de modo que parte del patrimonio del gestor también esté invertido en el fondo en el que trabaja".