Iberdrola y Endesa controlan 20 millones de contratos de luz en España, lo que les permite controlar dos de cada tres puntos de suministros en el país. Pero los competidores arañan terreno cada año para competir de tú a tú con las dos grandes eléctricas del país. En 2023, ambas compañías cedieron 463.000 clientes por este aumento de la competencia.
Gran parte de esta pérdida viene por parte de Iberdrola. La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán cerró 2022 con 10,88 millones de contratos en España y, según su informe anual, esta cifra se ha reducido a 10,47 millones. La gran parte de estos clientes vienen de la tarifa regulada. Hasta septiembre, según los datos de la CNMC, la principal comercializadora por número de clientes en el mercado libre en España, con 10,2 millones, había cedido por este tipo de tarifa un total de 139.000 puntos de suministro en este período, aunque sigue dominando el 33,8% del mercado.
Iberdrola apostó en este período por el ‘plan online’ para captar clientes a su tarifa de mercado libre, ya durante los dos últimos años. Es decir, una estrategia que le ha permitido captar y retener clientes con precio fijo, mientras iban desapareciendo sus contratos del Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), el mecanismo de fijación de precios establecido por la Administración.
La pérdida de clientes de Endesa se eleva hasta los 53.000 contratos. La empresa que dirige José Bogas cerró 2022 con una cartera de clientes de 9,93 millones de clientes y su cierre de 2023 se ha situado en 9,88 millones de clientes. Su principal pérdida ha sido en la tarifa regulada, que se ha recortado en este año en un 2,3%.
“En un ejercicio marcado por un endurecimiento de las condiciones competitivas en el que la propuesta de Endesa de proteger a los clientes de la volatilidad”, explicaba la compañía en sus cuentas anuales. La compañía apostó su tarifa ‘Conecta’ para captar nuevos clientes con precios competitivos y fidelizar con ‘One 3 períodos’. Al cierre de septiembre, según los datos de la CNMC, su cartera de clientes estaba en 9,8 millones y un 32,6% del mercado.
Aunque el propio Bogas detallaba en la presentación de resultados que el negocio de la comercialización en España provoca que la cartera de clientes de Endesa sufran 'grandes bandazos' mensuales ante el aumento de la competitividad y las diferentes estrategias comerciales.
Repsol aprovecha la caída de Iberdrola y Endesa
Naturgy cuenta es la tercera compañía en comercialización de electricidad con una cartera de unos 4,37 millones de puntos de suministro, que suponen el 14,5%. El cuarto en discordia es Repsol. A cierre de 2023, la petrolera alcanza en España una cartera de 2,1 millones de clientes incluyendo los 247.000 de Gana Energía y los 307.000 de CHC Energía (2,2 millones de clientes incluyendo también los 36 mil de Portugal).
Actualmente, estas cifras suponen una cuota de mercado del 5,6% (4,2% en 2022). “Este crecimiento se ha logrado gracias a una estrategia basada en una oferta de captación competitiva, al aprovechamiento de oportunidades de compra de carteras, a la apuesta por la fidelización y a la potenciación del crecimiento de Gana Energía”, explicaba la compañía.
Calma en la fuga del mercado regulado
Entre enero y septiembre, los cambios del mercado regulado al libre se han moderado y eso se refleja en el balance final de la compañías. En 2022, hubo 1,758 millones de cambios de clientes a favor del mercado libre mientras que en 2023 se limitó a 541.730 nuevos clientes del mercado libre, según datos del informe de supervisión de los cambios de Comercializador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Este frenazo en los cambios del mercado regulado al libre se ha visto acompañado de un fuerte crecimiento de los trasvases a la inversa en 2023. Así, entre enero y septiembre se ha registrado un importante incremento en los cambios del mercado libre al regulado sobre los cambios observados en 2022, que ascendieron a 335.079 en todo el ejercicio pasado, y solamente en los nueve primeros meses del año sumaban ya los 492.585. Una moderación que marcará el 2024 del negocio de comercialización de las grandes compañías.