España ha vuelto a sufrir una nueva sesión de presión de los mercados, lo que ha provocado que la bolsa cayera el viernes el 3,10% y que la prima de riesgo se disparase hasta los 563 puntos básicos, con el rendimiento del bono a diez años rozando el crítico 7%. La decepción que supuso el jueves para los inversores la negativa del BCE a comprar deuda soberana o a aprobar nuevas medidas para apaciguar a los mercados fue lo que provocó el nuevo repunte de las tensiones sobre España, explicaron los analistas. Los expertos también consideran que los mercados están presionando a España para que tome nuevas medidas, algo que, según el Gobierno, se hará.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha insistido en que la agenda reformista del Ejecutivo continuará y se iniciarán una serie de cambios profundos para garantizar la consolidación fiscal y hacer de España un país más competitivo. Sáenz de Santamaría ha pedido serenidad ante el repunte de la prima de riesgo española y ha recordado que en la última cumbre europea se marcó una línea de actuación a corto, medio y largo plazo para lograr la estabilidad del euro en cada uno de sus ámbitos y en su conjunto. La clave está en "saber todos lo que tenemos que hacer", y el Gobierno aprobará más reformas porque son "imprescindibles".
Grecia fue rescatada el 23 de abril de 2010 cuando su prima de riesgo estaba en 580 puntos básicos
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, también ha asegurado que España hará "todo lo posible" para superar la crisis y que su Ejecutivo seguirá trabajando para que la UE haga también cuanto esté en su mano. El Gobierno hacía esta consideración después de que la rentabilidad del bono español a 10 años alcanzara poco antes de las 11:00 horas del viernes el nivel del 7%, una cota que los expertos consideran insostenible, mientras la prima de riesgo se situaba por encima de los 560 puntos básicos.
Grecia fue rescatada el 23 de abril de 2010 cuando su prima de riesgo estaba en 580 puntos básicos, aunque el rendimiento de su bono a diez años aguantó hasta el 8,7%, por encima del 8,3 % que llevó a Irlanda a pedir auxilio, pero por debajo del 9,7 % que llegó a soportar Portugal. Al cierre de la sesión del viernes, el riesgo país España se situaba en los 563 puntos básicos, con el rendimiento del bono a diez años en el 6,95 %.
La prima de riesgo de Grecia ha cerrado en los 2.434 puntos básicos; la de Portugal, en los 888; la de Irlanda, en los 496 y la de Italia, en 496, con el rendimiento de su bono a diez años en el 6,026 %. Al mismo tiempo que la prima de riesgo española repuntaba, el mercado de renta variable español era el que más caía entre las principales plazas europeas. Al cierre, la bolsa española cayó el 3,10 % y cerró su cuarta peor semana del año, en la que perdió un 5,12 %, con lo que ha roto cuatro semanas de ganancias consecutivas. La Bolsa de Milán, por su parte, bajó el 2,53 %; Fráncfort, el 1,92 %; Londres, el 0,53 % y París, el 1,88 %.
Ante la nueva presión de los mercados sobre España, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha asegurado que se está "siguiendo muy de cerca los desarrollos de la situación española", y ha asegurado que ha llamado a Finlandia y a todos los países del euro a cumplir con lo pactado en la última cumbre europea de la semana pasada. Y ello después de que el país nórdico se haya negado a que el fondo europeo de rescate compre bonos de deuda soberana. Además, Durao Barroso ha reiterado su confianza en que las autoridades españolas harán todo lo necesario para superar la crisis. En este sentido, la Comisión Europea ha recordado al Gobierno que tiene que presentar un presupuesto convincente para 2013 y 2014, con medidas de consolidación fiscal y control del gasto excesivo de las comunidades autónomas, condiciones para poder aumentar un año más su objetivo de déficit.