Los mercados explotaban cerca del cierre. La calma que parecía la tónica habitual en estos días reinaba por la mañana, pero poco después del mediodía estallaba un furor vendedor. El Ibex se desplomaba un demoledor 5,82% , mientras el bono a 10 años elevaba su rentabilidad hasta el 7,27%. Más duro era comprobar cómo el 5 años estaba al 7,03%. Hablar de prima de riesgo en estos momentos es casi irrelevante. Los 612 puntos reflejan la situación de desamparo total en que se encuentra España y cómo Alemania se beneficia de su privilegiada situación de activo refugio. Este día es un SOS agónico al Banco Central Europeo (BCE). Si el organismo emisor no actúa, este país no llega a septiembre.
Por supuesto, la prima de riesgo es máximo histórico, mientras el bund germano fijaba su rendimiento más bajo, del 1,16%, inédito hasta el momento. El día era un hervidero de malas noticias, a pesar de que en las altas esferas europeas siguen llegando noticias sobre el rescate bancario a España que indican que la operación saldrá adelante.
La aprobación del Memorando de Entendimiento y la luz verde ayer por parte del Bundestag en Alemania no eran capaces de impedir el pánico desatado a raíz del rescate solicitado por la Comunidad Valenciana. Las absolutamente alarmantes declaraciones del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, sobre caída de la recaudación fiscal, esparcían todo tipo de temores. Como dato del día, hoy se cumplía el primer aniversario de la salida a Bolsa de Bankia.
Precisamente, este mes tienen que llegar los primeros fondos para el rescate financiero, pero si el BCE no echa una mano antes, la situación va a ser irremediable para entonces. De momento, la semana que viene hay subasta de Letras a 3 y 6 meses, pero incluso unos activos tan apetitosos como estos pueden fallar si el mercado castiga de esta manera. Las protestas mientras tanto, suben de tono en las calles.
