Más parados y menos gasto en el subsidio de desempleo. Ésa es la ecuación que ha escrito el Gobierno para 2013. Para despejar la incógnita, el Ejecutivo sólo tiene dos soluciones: o una corrección milmillonaria del presupuesto que superaría los 6.000 millones o un recorte de las prestaciones de desempleo que todavía se niega oficialmente.
El Ejecutivo había previsto para este año un gasto en políticas de desempleo de unos 26.993,70 millones de euros, lo que representa un descenso de 1.807 millones frente a los 28.805 millones de euros presupuestados para el año 2012. Esa caída del 6,3% en la dotación ha provocado que el repunte del paro esté dejando ya exiguas las arcas del Servicio Público de Empleo, el antiguo INEM.
Sólo en los tres primeros meses del año, la cifra de parados ha obligado al Ejecutivo a consumir ya casi un tercio del presupuesto de todo el año. El Ejecutivo paga unos 2.800 millones de euros al mes en subsidios de paro, casi un 3% más al mes que en el mismo periodo de 2012.
Las dos alternativas que se abren ahora (corregir el presupuesto y recortar el subsidio) son caminos ya andados para el Ejecutivo:
- Corrección del Presupuesto: Si el paro se mantiene a este ritmo, el Ejecutivo tendría que hacer frente a enmendar sus propias cuentas con un nuevo crédito que debería superar los 6.000 millones de euros. De hecho, el pasado año ya recurrió a una medida similar cuando aportó casi 3.000 millones extras.
- Recorte de la prestación: El año pasado, el Real Decreto-ley 20/2012, de 13 de julio, aprobó medidas que recortaban las prestaciones mediante lo que bautizó como «medidas imprescindibles para asegurar la viabilidad futura del sistema de protección por desempleo». En 2012 se decretó el recorte de la prestación a partir del séptimo mes y el paro para mayores de 52 años, así como la eliminación del subsidio especial para mayores de 45 años. Este año, se ha insinuado la posibilidad de recortar la duración del subsidio de los 24 meses actuales a los 18 de manera generalizada.
En la actualidad, unos 2.170.000 parados (el 35% del total) ya no reciben ninguna contribución pública, en la mayoría de los casos, tras haber agotado los dos años de prestación que contempla la ley.
La otra incógnita del empleo: más parados y menos tasa
Oficialmente, el Ejecutivo admite que en 2013 todavía se destruirá empleo. Sin embargo, el nuevo cuadro macro no contempla ni la menor subida de la tasa de paro que quedaría en el 27,1%, ligeramente por debajo del actual 27,16% registrado en la EPA. Más parados y menos tasa sólo puede explicarse con una salida del país de un porcentaje importante de población.
Fuentes del Ejecutivo reconocen que esperan una salida "notable" de una buena parte de la población para cuadrar esa previsión de paro durante todo el año.