A Telefónica le han sentado bien los tambores de fusión que ponen ritmo al mercado de las telecomunicaciones. La acción del operador español se ha cambiado estos días por 4,42 euros, lo que supone la mejor valoración del título en los últimos 12 meses.
Esta cotización se produjo el 11 de febrero, sólo cuatro días después de que se publicarán las negociaciones entre Orange y Vodafone en torno a una posible fusión entre ambas compañías. La consolidación del mercado supondría, a priori, una contención en el descenso en los precios de las tarifas de telecomunicaciones, algo que beneficia, obviamente, a Telefónica.
La competitividad en el mercado es un problema para las grandes telecos, que llevan años reduciendo ingresos por la presión que insuflan los llamados OMV (Operadores Móviles Virtuales), aquellos que utilizan las redes de las grandes compañías para ofrecer servicio.
La acción subió un 5,5%
El pasado 25 de agosto la acción de la compañía de telecomunicaciones liderada por José María Álvarez-Pallete llegó a cambiarse por 4,31 euros la unidad. Fue la valoración más alta en los últimos 12 meses, hasta que llegó el 11 de febrero de 2022.
Poco antes, el 7 de febrero, la acción de Telefónica se situaba en los 4,19 euros para dispararse hasta los 4,42 euros cuatro días después, lo que supone un incremento del 5,5% en ese periodo de tiempo. A cierre de mercado de ayer la acción cerró a 4,38 euros.
Telefónica y las fusiones a varias bandas
Ahora mismo todos los escenarios en torno a las fusiones están abiertos. Orange y Vodafone mantenienen contactos para consolidar el sector, tal y como publicó el diario económico Expansión, pero no es la única posibilidad sobre el tablero.
Este lunes Vozpópuli publicaba que Orange y Vodafone también mantienen contactos para fusionarse, algo que ya ha sucedido (las conversaciones) en el pasado si hablamos de las filiales mundiales. Unas negociaciones que no llegaron a buen puerto. El hecho de que Orange esté participada por el Gobierno francés al 23% fue un obstáculo para la operación.
Está por ver si en España también esta particularidad sería un problema. En cualquier caso, fuentes del sector aseguran que este va a ser el año de las fusiones entre grandes corporaciones. Algo que complace a Telefónica por lo que supone para los precios de las tarifas -presumiblemente se contendrán los precios a la baja-.
Si hace unos años el objetivo de la Comisión Europea era impulsar la competencia al máximo, ahora parece que las tornas han cambiado
Algo en lo que tendrá mucho que decir la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), quien hasta la fecha ha mantenido una postura condescendiente para incrementar la competitividad del sector, impulsado como decimos por compañías low cost que han socavado mucho las cuentas de los grandes actores del sector de las telecomunicaciones.
Bruselas no ve con malos ojos el escenario de fusiones entre telecos. Si hace unos años el objetivo de la Comisión Europea era impulsar la competencia al máximo, ahora parece que las tornas han cambiado, tal y como adelantó este diario. El escenario ahora pasa porque Europa tenga cuatro o cinco grandes operadores para toda la región, entre los que estaría Telefónica.
Se trata de algo razonable atendiendo a la forma en la que están configurados los mercados de telecomunicaciones en países como China o Estados Unidos, competidores directos de Europa. En esos casos, son tres o cuatro los operadores dominantes o más relevantes del sector. En el viejo continente, sin embargo, esta cifra está muy por encima. En cada país hay aproximadamente dos o tres actores de peso.