Mientras que los préstamos para empresas y autónomos aprobados por el Gobierno a través de Líneas del ICO para combatir el impacto de la pandemia en la economía se han ido agotando a gran velocidad, los dirigidos a la ayuda para el alquiler de personas en situación de vulnerabilidad, por importe de 1.200 millones de euros, no acaban de arrancar.
El pasado 1 de mayo se publicó en el BOE la orden del Ministerio de Transportes por la que se definen los requisitos de los arrendatarios de vivienda para acceder a ayudas transitorias de financiación, establecidas en el artículo 9 del Real Decreto-ley 11/2020, de 31 de marzo.
De acuerdo a la Orden ministerial, es el ICO el organismo encargado de gestionar las ayudas, a través de la Línea Avales Arrendamiento COVID-19, concedidos por las entidades de crédito adheridas, que no devengarán ningún tipo de gastos e intereses para el solicitante.
El Ministerio que dirige Ábalos estima que ofrecerá los primeros datos sobre los préstamos ICO para el alquiler en una o dos semanas
Desde el Ministerio dirigido por José Luis Ábalos se reconoce que a día de hoy todavía no hay datos disponibles que ofrecer sobre el desarrollo de esta línea de avales, y que la muestra actual no es representativa. El Ministerio estima que en una o dos semanas se podrán ofrecer los primeros datos.
Sobre la lentitud en su evolución se apuntan diversas causas. Además de las dificultades propias de la situación actual provocadas por la pandemia, se indica que las entidades de crédito hasta ahora han estado volcadas en la gestión de préstamos avalados por el ICO para empresas y autónomos, ante el alud de solicitantes.
Otras fuentes distintas, del sector inmobiliario, señalan a este diario la complejidad del sistema ideado para aquellas personas que soliciten este tipo de préstamos, y que no todos los bancos se han adherido al programa.
Asval, la asociación de propietarios de vivienda en alquiler, propone un fondo de ayuda directa de 750 millones como alternativa al ICO
La evolución de esta línea de avales para el alquiler contrasta con la velocidad a la que se están entregando las líneas de avales destinados a empresas y autónomos. El Gobierno aprobó la pasada semana una nueva línea ICO por importe de 40.000 millones de euros, que se suma a la anterior de 100.000 millones, aprobada el pasado 17 de marzo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, explicó que se han registrado 10.000 operaciones al día de esa primera línea de avales para empresas. Hasta ahora empresas y autónomos han accedido a 85.150 millones de euros en financiación.
A 1 de julio se han aprobado 663.995 operaciones, de las que un 97,6% han sido realizadas por pequeñas empresas y autónomos, con un importe avalado de 46.777 millones de euros.
Fondo de 750 millones
Por ahora el Gobierno ha incidido en las ayudas a los inquilinos dejando de lado a los propietarios que alquilan sus viviendas en España, de los que solo el 5% aproximadamente son fondos, y el resto particulares.
La asociación que representa a los propietarios de vivienda en alquiler, Asval, propone la creación de un fondo de ayuda directa al alquiler de 750 millones de euros como alternativa a la línea de avales de 1.200 millones de euros del ICO.
En opinión de Beatriz Toribio, directora general de Asval, los préstamos del ICO al alquiler no están funcionando porque, en definitiva, suponen la generación de una nueva deuda a personas en situación crítica. El fondo de ayuda directa de 750 millones de euros "supondría rebajar el esfuerzo del inquilino del 48% al 30% en el pago del alquiler".
Además apunta que los préstamos del ICO no diferencian entre inquilinos de distintas provincias españolas en las que el precio del alquiler es muy distinto dependiendo del lugar de residencia.
La Línea de avales del organismo público ofrece la posibilidad de obtener como máximo 900 euros al mes durante seis meses; pero no es lo mismo disponer de esa cantidad para alquilar una vivienda en Madrid que en otra ciudad en la que los precios son mucho más reducidos.