Se veía venir, pero los resultados derivados de la aplicación de los nuevos tramos impositivos en el impuesto de matriculación han sido peores todavía de lo esperado. Por mucho que las distintas patronales del sector avisaran y reclamaran al Gobierno que modificase los baremos que marcan desde el 1 de enero los nuevos tramos de emisiones de CO2, éste se ha puesto de perfil y ha dejado que las nuevas normativas se apliquen sin estudiar sus consecuencias.
El resultado, además, afecta a las propias arcas del Estado, pues el impacto negativo que ha tenido la subida del impuesto de matriculación, efectiva como hemos dicho desde el pasado 1 de enero, habría impedido a Hacienda recaudar 105 millones de euros el mes pasado, según una estimación hecha por la patronal de los concesionarios, Faconauto.
La patronal de los concesionarios calcula que, sin la aplicación de esa subida, el mercado, en lugar de haber caído un 51%, con 42.000 unidades matriculadas, lo habría hecho aproximadamente un 15%, con lo que se podrían haber matriculado unos 36.000 vehículos más en enero. La pérdida de estas ventas habría impedido a las arcas públicas recaudar unos 105 millones de euros en concepto del propio impuesto de matriculación y también de IVA.
Desde Faconauto advierten de que la subida del impuesto ha sido la principal causa del descalabro de las matriculaciones el mes pasado, a lo que se unió el impacto de la recaída de la pandemia y el final del plan Renove. De esta manera, se ha desmovilizado la demanda, lo que, a vista de las cifras presentadas, está consiguiendo lo contrario de lo que debería ser una prioridad para que el automóvil sea una palanca de crecimiento en esta salida de la crisis: impulsar las ventas, seguir aportando a las arcas públicas y no detener ni la renovación del parque ni la transición hacia una movilidad descarbonizada.
La patronal ha indicado que se puede revertir la situación si se buscan fórmulas para evitar el impacto que sobre los compradores está teniendo la subida del impuesto de matriculación, como sí se ha hecho en otros mercados de referencia, como son el italiano y el francés. Además, y en esta línea, considera que utilizando los 200 millones de euros sobrantes del Plan Renove 2020 en una nueva edición, con alguna mejora, se contribuiría a frenar la tendencia negativa en la que se encuentra el sector y que, previsiblemente, se acentuará en este primer trimestre del año.
El peor enero en treinta años
Y es que las matriculaciones han comenzado el año con la peor caída de la serie histórica de los últimos treinta años, con un descenso de las ventas del 51,5%, hasta las 41.966 unidades. No hay un enero peor desde 1989 que se tiene registro de las ventas mensuales. Un primer mes del año en el que han confluido una serie de hechos negativos que han impactado en la demanda. Es innegable que los días de bloqueo provocados por la borrasca Filomena han recortado ventas.
Pero, además, se compara con un mes de enero de 2020, en el que no habían empezado aún las restricciones por la pandemia de la covid-19. Al comparar con un mercado pre-pandémico, el resultado es más negativo, por no obviar que en 2021 hubo dos días laborables menos. Pero estos tres efectos externos se han visto muy agravados por la subida del Impuesto de Matriculación en enero y por el fin del plan RENOVE, pese a no haber consumido el 80% de los fondos. Estos dos impactos, que sin duda han rebajado el mercado, se podían haber corregido y la caída hubiera sido inferior.
Por todo ello, las emisiones medias de CO2 de los coches vendidos en el mes de enero se quedan en 127,2 gramos de CO2 por kilómetro, si bien hay que considerar que es el primer mes que este dato responde a la nueva medición WLTP. Todos los canales pierden casi la mitad de sus ventas en enero de 2021. El canal de empresas es el que menos recorta, con una caída del 43,9% y 18.397 unidades, aunque el más perjudicado es el canal de alquiladores, con una caída del 65,4%.