De mecenas a villano en un año. En 2011, los Premios ‘Descubrir el Arte’, que concede la revista homónima del grupo Unidad Editorial, alcanzaban su tercera edición con el objetivo de rendir homenaje a nombres propios y a instituciones que “contribuyen a convertir a España en un sello de calidad artística a nivel internacional”. Entre los premiados se coló un nombre propio que por entonces pasaba desapercibido, pero que en la actualidad está en la picota informativa: Gao Ping.
El supuesto cabecilla de la red china de blanqueo de capitales recibió el galardón en la categoría de Promoción del Arte Español en el Exterior. “En menos de una década, se ha convertido en embajador del arte español en China y ha despertado en España el interés por la nueva generación de artistas emergentes del dinámico país asiático”, decía de él la revista. Gao Ping recibió el premio de manos del creador de la escultura con el que se reconoce el galardón, el artista burgalés Alberto Bañuelos. “A pesar de las diferencias, el arte es en ambos países una lengua común", recuerdan a El Buscón que aseguró en la gala el ahora imputado por blanquear más de mil millones de euros.
Junto a Ping, se retrataron representantes de la Fundación Santander (Premio a la Excelencia), de la Fundación Bancaja (Premio Recuperación del Patrimonio) y del Museo Reina Sofía (Premio Proyecto Conjunto), donde tuvo lugar el acto de entrega. También Carmen Cervera, la directora del Instituto Valenciano de Arte Moderno, Consuelo Císcar, y la consejera de Cultura y Turismo de Castilla y León, María José Salgueiro, entre otros representantes de organizaciones públicas y privadas.
