La guerra convencional ha estallado en Ucrania, después de que Rusia haya lanzado sus tropas sobre el país. Desde Kiev detallan los partes de guerra y llaman a la población a sumarse en armas a la línea de defensa contra los militares enviados por Putin. Europa se sume en una crisis bélica y la OTAN articula sus despliegues en la divisoria con Rusia. España, como país miembro de la Alianza, participa en varias misiones en zonas calientes: desde los bálticos hasta el Mar Negro. Por tierra, mar y aire, cerca de 800 efectivos españoles nutren el despliegue internacional.
El Ejército de Tierra cuenta con 350 efectivos en las estepas letonas, que articulan su actividad en torno a sus vehículos blindados Leopardo y Pizarro. Supone uno de los grupos de presencia avanzada de la OTAN, que también están presentes en otros países en el este de Europa y que se están reforzando a tenor de los últimos acontecimientos.
Los efectivos españoles trabajan en maniobras constantes para fomentar la interoperabilidad con otros aliados de la OTAN y mostrar músculo en una frontera clave para los intereses de la Alianza. Como contó Vozpópuli, las tropas españolas han participado estos días en un ejercicio con morteros para "disuadir a cualquier adversario". Y en la situación de crisis que se vive en estas jornadas, todas las miradas apuntan indudablemente hacia Moscú.
Por tierra, pero también por aire. La frontera terrestre de los países bálticos es clave para la OTAN, pero también lo es su espacio aéreo. Estonia, Letonia y Lituania no cuentan con los medios suficientes para llevar a cabo sus labores de policía aérea, en una zona frecuentada por aviones rusos que no cumplen con la normativa internacional. La misión se desempeña desde el año 2006 y el Ejército del Aire, con sus Eurofighter y F-18, es uno de los países más activos. Precisamente uno de los primeros puntos a los que Rusia ha atacado en Ucrania es a su flota aérea.
Actualmente no hay cazas de combate españoles en la región báltica, pero es uno de los escenarios más habituales en los que se desempeñan. Donde si están desplegados es en Bulgaria. Cuatro aviones Eurofighter y un contingente de 130 efectivos que actúan como policía aérea ante las continuas operaciones aéreas de Rusia que no cumplen con la normativa internacional de vuelo. Los cazas españoles ya han intervenido ante incidentes reales.
Y, por mar, tres buques de la Armada Española participan en las misiones de la OTAN. Son el cazaminas Sella, con una dotación de 42 efectivos, el buque de acción marítima Meteoro, con otros 52, y la fragata Blas de Lezo, con 190. Navegan por aguas del Mediterráneo y del Mar Negro; espacios que se han convertido en un punto crítico en el actual conflicto de Ucrania.
La respuesta de España ante Rusia
Ejército de Tierra, Ejército del Aire y Armada Española aportan cerca de 800 militares a los despliegues de la OTAN en la frontera de Europa con Rusia. Este jueves se ha convocado una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en el Palacio de la Zarzuela, presidida por el rey Felipe VI, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realizará una declaración institucional desde el Palacio de La Moncloa.
Pedro Sánchez ya ha adelantado la necesidad de "coordinar" una respuesta de la Unión Europea y de la OTAN ante los últimos acontecimientos. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, apuntó este miércoles desde el Congreso que Europa atravesaba el mayor despliegue militar "desde la Segunda Guerra Mundial".
