Este año facturará casi 7.000 millones de euros y superará la barrera de los 1.000 millones en Ebtida, está presente en más de 70 países de los 5 continentes y cuenta con una plantilla de 23.000 trabajadores repartidos en una maraña de más 600 sociedades. Empezó a cotizar en 1996 y en 2008 saltó al Ibex 35. Se trata de Abengoa, una empresa sevillana de la familia  Benjumea de los años 40, que hasta hace poco seguía gestionándose como una pequeña empresa familiar.

Entre el fundador, Javier Benjumea, sus hijos (Javier y Felipe -el actual presidente y consejero delegado-) y primos (José Luis Aya y José Joaquín Abaurre) han llevado  las riendas de la compañía durante años. Pero esta hermética estructura ha dado un giro radical. Abengoa tiene su propio lobby con docenas de políticos influyentes, ex diplomáticos, economistas de grandes instituciones, incluido buenos contactos con  la Casa Real… Con estos potentes fichajes, Abengoa ha  conseguido triplicar su valor en bolsa (de 500 millones en 2003 a 1.500 millones en 2011), en cinco años ha duplicado su facturación (en 2006 facturó 3.600 millones) y en los tres años de crisis económica mundial ha multiplicado por dos su beneficio (en 2008 ganó 140 millones y en 2011 llegará a los 275 millones, según las estimaciones del mercado).

Un susto en la Audiencia Nacional en 2003 activó una profunda transformación en la compañía. Nada de ingeniosos proyectos ni fuertes inversiones. La clave estaba en ampliar sin límites su pequeña red de influencia, que Benjumea había ido tejiendo en el entorno andaluz. Su proximidad con Manuel Chaves y su entorno le había generado buenos frutos en forma de adjudicaciones y licitaciones, pero ya no eran suficientes.

Empieza aquí la verdadera historia del lobby de Abengoa que le ha permitido crecer de forma imparable en los últimos diez años, abrir delegaciones por medio mundo, conseguir adjudicaciones y licencias de las administraciones locales, autonómicas y nacionales, y le ha permitido salir airoso de un posible delito penal de administración desleal y falseamiento de cuentas contra los ejecutivos de Abengoa (el llamado caso Xfera se archivó en 2007). Por poner un ejemplo reciente, Abengoa fue el año pasado la empresa más beneficiada del reparto de los MW termosolares subvencionados, y el Gobierno preparó una regulación de los biocombustibles muy beneficiosa para el negocio de esta área de Abengoa.

Políticos, diplomáticos… Los conseguidores.
Son conocidos los nombres que han pasado por los consejos de administración de la matriz o de sus filiales. Del comienzo destacan José Luis Méndez (ex director general de Caiza Galicia) e Ignacio Polanco (Prisa). Pero en la actualidad, en la matriz Abengoa se sientan en el consejo nombres como José Terceiro Lomba (catedrático de Economía, político entre 1981 y 1982 y consejero de Prisa), Carlos Sebastián (desde 2005), hermano del ministro de Industria y ex jefe de la oficina Económica del Gobierno del PSOE. Se encuentra también Jose Borrel, que entre 1982 y 1996 fue sucesivamente Secretario General del Presupuesto, Secretario de Estado de Hacienda y Ministro de Obras Publicas, Telecomunicaciones, Transportes y Medio Ambiente.  

Muy significativo es el papel de Borrel como presidente del comité internacional de Abengoa. En él se encuentran personalidades influyentes como  Kemal Dervis (ex ministro de Asuntos Económicos de Turquía, fue responsable del programa económico que ayudó a Turquía a superar la crisis financiera de 2001 y en la actualidad es  vicepresidente y director de Economía Global y Desarrollo en la Institución Brookings en Washington); Jerson Kelman (presidente de la Asociación Brasileña de Recursos Hídricos (ABRH) y el primer presidente de la Agencia Nacional del Aguas), Nicholas Stern (fue vicepresidente senior y economista jefe del Banco Mundial y asesor económico del gobierno británico);  Pamposh Bhat (prestigiosa química, es Consejera de Perenia Carbón en India, y Consultora de Naciones Unidas para la Energía Renovable y el Cambio de Climático);  Ricardo Hausmann (economista y académico venezolano, es el actual director del Centro para el Desarrollo Internacional y catedrático en la Universidad de Harvard); Bill Richardson (político del partido Demócrata de norteamérica, secretario de Estado de Energía de 1998 a 2001 con el ex presidente  Bill Clinton y Gobernador de Nuevo México, puesto en el que ha permanecido hasta 2010), y entre otros, Alberto Aza (diplomático, ex embajador en Londres, Belice y México, entre otros destinos, además de ex jefe de la Casa Real).

Siguiendo con el repaso del consejo de Abengoa, se encuentra Ricardo Martínez Rico, mano derecha de Cristóbal Montoro con quien fundó el despacho Equipo Económico. Es miembro del Advisory Board europeo creado por el Presidente de la Patronal americana (US Chamber of Commerce of the United States) en Washington, donde dirigió la Oficina Económica y Comercial de España entre 2005 y 2006. 

Rico se encontraba como consejero en una de las filiales de Abengoa y unas semanas antes de las elecciones generales, y ante la victoria del PP, los Benjumea elevaron de categoría a Martínez Rico. De hecho Rico ocupa el puesto de Daniel Villalba Vila, socio de Carlos Sebastián y consejero de Vueling, que hasta el año pasado se sentaba en el consejo de Abengoa bioenergía y ahora ha pasado a ser el vicepresidente de la filial solar. Abengoa solar es la mayor apuesta del grupo andaluz, ya que la promoción de plantas termosolares se lleva cerca de 2.000 millones entre 2011 y 2013.

Otro nombre conocido es el de Pedro Marín, ex secretario de Estado de Energía con Sebastián, al que los Benjumea tuvieron en el área de biocombustibles.  Siguiendo por el ala PSOE, los Benjumea han acercado a su empresa a Rafael Escuredo, José Rodríguez de la Borbolla (Fundación Focus) y Cándido Velázquez, ex presidente Telefónica, ex presidente de Tabacalera y gran amigo de Felipe Gonzalez. Por el PP, destacan José Manuel Fernández Norniella, amigo de Rato, Manuel Olivencia, suegro de Javier Arenas.

En el área  internacional, el papel que ha desempeñado Carlos Borbón, el primo del Rey, ha sido crucial. En México, donde Abengoa está presente desde 1993, la prensa local ha destacado la posición de privilegio que posee Abengoa en los últimos años, al ser la empresa mayor beneficiada del gobierno de Felipe Calderón, a través de los contratos y licitaciones que consigue la petrolera estatal Pemex (accionista de Repsol). La mitad de los ingresos de Abengoa en América proceden de Calderón, según destaca la prensa mejicana.

Vinculados a la nobleza también han pasado por Abengoa personajes como Álvaro Fernández Villaverde, duque de San Carlos y marqués del Viso y Carlos Fritz-James Stuart, duque de Huéscar (Fundación Focus).

La lista de economistas, abogados, embajadores, politicos y sobre todo personalidades vinculadas al poder no tiene fin, para muchos, este es el verdadero Know how que esconde  el holding Abengoa, aquella empresa familiar que se dedicaba a fabricar contadores eléctricos en la década de los cuarenta.